El director y productor español Pedro Almodóvar, presidente del jurado de la 70 edición del Festival de Cannes, se emocionó hoy al recordar a los "héroes" del combate contra el Sida que el francés Robin Campillo lleva a la gran pantalla en "120 battements par minute".
Esa película sobre el activismo francés contra esa enfermedad en la década de los ochenta consiguió el Gran Premio del Jurado, pero no la Palma de Oro, que fue para "The Square", del sueco Ruben Östlund.
"Más allá de si perteneces como yo o no a la comunidad LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales), Campillo cuenta la película de héroes auténticos que han salvado muchas vidas, y todos estuvimos de acuerdo en eso", señaló.
Almodóvar, que embargado por la emoción tuvo que hacer una pausa en mitad de la frase y fue aplaudido por la sala de prensa al terminar, dejó intuir que ese filme fue su favorito para obtener el máximo galardón.
"Me emocioné desde el principio y hasta el final. Mañana se verá en los periódicos lo que la gente y los periodistas piensan del palmarés, (...) pero este es un jurado muy democrático, del que yo soy una novena parte. Esto es lo único que puedo decir".
El cineasta se mostró convencido de que esa cinta será bien recibida en su paso por las salas: "La gran mayoría de la gente amará la película de Campillo. Estoy seguro de que va a tener mucho éxito en todas partes".
Los actores estadounidenses Jessica Chastain y Will Smith, el realizador italiano Paolo Sorrentino, la artista china Fang Bingbing, la directora, guionista y productora alemana Maren Ade y la francesa Agnès Jaoui, junto al realizador surcoreano Park Chan-Wook y el compositor francés Gabriel Yared, le acompañaron en el jurado.
"No ha habido sangre. Nos hemos respetado mucho todos. Eso no quiere decir que todos pensáramos lo mismo, ha habido criterios muy distintos", añadió Almodóvar, según el cual tuvieron "discusiones súper educadas y a veces muy cargadas de fuerza y entusiasmo, pero un entusiasmo carente de violencia".
Esos intercambios se decantaron por "The Square", que, plagada de elementos surrealistas, constituye una sátira de la sociedad occidental.
"Habla de algo que incluso ahora estamos experimentando, la dictadura del ser políticamente correcto, que es tan peligrosa y horrible como cualquier otra", concluyó, contento de que "un tema tan serio" sea tratado "con una increíble imaginación".
En una edición carente, a lo largo del certamen, de un claro favorito para la Palma de Oro, el cineasta defendió la calidad de los filmes en competición.
"He sentido el impacto de encontrarme ante una obra maestra en este festival y es una experiencia extraordinaria", apuntó, precisando que "no es justo para nadie que los comparen" con clásicos como Federico Fellini o Luis Buñuel.
El pasado 17 de mayo, en la apertura de Cannes, Almodovar dijo que tenía la esperanza de experimentar la misma sensación que debieron tener anteriores jurados de Cannes al ver películas como "Viridiana", de Buñuel, "La dolce vita", de Fellini, o "Apocalypse Now", de Francis Ford Coppola, ganadoras de la Palma de Oro.
"No debería haberlo dicho en una conferencia de prensa. (...) Era solo para sonar interesante", bromeó Almodóvar, de las que cinco de sus cintas han sido seleccionadas a lo largo de los años en competición.
"Todo sobre mi madre" le valió el galardón al mejor director y "Volver" el premio al mejor guión y premio colectivo a la mejor interpretación femenina; a las que se suman "Los abrazos rotos", "La piel que habito" y "Julieta", que se fueron de vacío.
cvtp