Apenas este martes el mundo entero y otras galaxias lloraban la partida de Carrie Fisher —la Princesa Leia Organa del universo Star Wars— cuando 24 horas después, su madre, la icónica actriz de Broadway, Debbie Reynolds, partió a su lado.
Al menos así es como su hijo le comentó ayer al sitio de la revista Variety, que sintió la partida de Reynolds, de 84 años, tan sólo unas horas después de la muerte de Carrie a los 60 años a causa de un infarto.
“Quería estar con Carrie”, le dijo su hijo Todd a la revista tras la muerte de Debbie, luego de que este miércoles fuera hospitalizada tras sufrir un accidente cerebrovascular.
La octogenaria actriz se encontraba en compañía de su hijo Todd haciendo los preparativos para el funeral de Carrie Fisher.
Debbie fue trasladada a un hospital poco después de las 13:00 horas tiempo del pacífico cuando alguien desde su residencia en Beverly Hills llamó al 911 para reportar un posible derrame cerebral.
Cuando ingresó al hospital, la condición de la cantante y actriz nominada al Oscar era reportada como grave, seis horas más tarde fue declarada muerta.
La carrera de Reynolds comenzó inesperadamente en 1948, tras ganar un concurso de belleza con tan sólo 16 años. Luego de la victoria, dos de los jueces del certamen resultaron ser productores de Warner Brothers y MGM. Cuando escucharon cómo Reynolds interpretó del tema “Im Just a Square in a Social Circle”, de Betty Hutton, quedaron interesados en la naciente estrella.
Años más tarde, Reynolds hizo su debut en la pantalla grande junto a June Haver y James Baron en The Daughter of Rosie O'Grady. A este trabajo le vinieron otros como el musical Two Weeks with Love.
Sin duda uno de sus papeles más importantes y que le dio su estatus de icono hollywoodense fue el que hizo en el filme Singin in the rain, donde dio vida a Kathy Selden y en el que compartió créditos con Gene Kelly y Donald O’Conner.
A lo largo de su vida la rubia tuvo una relación muy cercana, pero a veces tempestuosa con su hija; fue una de las estrellas principales de productoras como MGM en la década de los 50 y 60 en películas como The Unsinkable Molly Brown de 1964, por la que recibió du primera y única nominación al Oscar a mejor actriz y el cual le ganó Julie Andrews por Mary Poppins.
En enero de 2015, Reynolds recibió el premio SAG a la trayectoria artística; en noviembre de ese año, la actriz también fue condecorada por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas con el Premio Humanitario Jean Hersholt, reconocimiento que no pudo recoger, pues se estaba recuperando de una cirugía.
Este premio se lo ganó tras una vida dedicada a la filantropía, en la que se incluía su trabajo de más de 60 años al frente de la organización Thalians en pro de la salud mental.
Su vida privada estuvo siempre en el ojo de los tabloides, uno de los más recordados fue el que protagonizó cuando su esposo, el cantante Eddie Fisher, la dejó por Elizabeth Taylor en 1958.
A este escándalo su sumó el que ocasionó el divorcio de su segundo esposo, el magnate del zapato Harry Karl, a quien Debbie demandó por malversación de su dinero.
Como pionera de la época de Oro de Hollywood, la estrella siempre luchó por la preservación del patrimonio de la Meca del Cine, es por ello que a lo largo de su vida compró miles de piezas a los estudios cinematográficos.
Quizá la adquisición más significativa fue la que hizo a MGM, empresa a la que compró trajes y accesorios, incluyendo el “vestido de metro” de Marilyn Monroe de The Seven Year Itch, un sombrero de copa de Charlie Chaplin y una copia de las zapatillas de rubí de The Wizard of Oz.
En la década de los 80 el trabajo para la actriz no faltó, aunque ya no era el mismo que tenía 20 años antes; actuó en shows de televisión como The Golden girls y Roseanne.
En los 90, las nuevas generaciones disfrutaron de su presencia en la pantalla chica gracias a las series Tocados por un ángel y Will & Grace (que duró ocho temporadas) , en la que daba vida a la madre de la protagonista.
Por este trabajo en el 2000 Reynolds fue nominada a un Emmy en la categoría de Mejor actriz invitada en Serie de comedia.
Hace tres años la actriz volvió a la películas en la cinta Behind the Candelabra que dirigió Steven Soderbergh para HBO. También puso su voz en series animadas como Kim Possible y Family Guy.
La actriz se casó tres veces, pero sus tres matrimonios terminaron en divorcio. Tuvo dos hijos: Carrie y Todd, de su primera relación, quienes también se involucraron en la industria del entretenimiento, Carrie como actriz y Todd como actor, director, productor y cineasta.