Más Información
Guadalupe Taddei solicitará ampliación del presupuesto para la elección judicial a la Cámara de Diputados; “si funciona, estaremos mejor en calidad y resultados"
Sheinbaum es una "consumidora voraz" de información: José Merino; el tablero de seguridad, herramienta clave, destaca
IMSS-Bienestar asegura mantener contratados a 2 mil trabajadores en entidades no adheridas al organismo
Rosa Icela Rodríguez se reúne con próximo titular del INM; “arrancaremos el 2025 con mucho trabajo”, asegura
SSa llama a tomar medidas preventivas ante bajas temperaturas; pide proteger salud por temporada invernal
La boda entre las estrellas cinematográficas María Félix y Jorge Negrete se realizó a las 13:30 horas del 18 de octubre de 1952, ante cerca de mil invitados.
EL UNIVERSAL dio la exclusiva del enlace matrimonial dos semanas antes y poco después publicó una fotografía de la invitación, en donde se leía: “Damas, traje de calle con rebozo”.
El evento fue tan mediático que cines reprogramaron El peñón de las ánimas (estrenada nueve años antes), protagonizada por los contrayentes, con el eslogan "¡Nace un gran amor!, ¡el romance más espectacular del cine mexicano!".
¿El juez de la boda? El mismo que en su momento casó a La Doña con el compositor Agustín Lara y a Negrete, con Gloria Marín.
“Es probable que el problema legal que impedía al popular charro de la pantalla contraer nuevas nupcias, por su reciente divorcio haya sido zanjado”, se reportó.
A la boda asistieron entre otros las actrices Miroslava y Columba Domínguez, los cineastas Emilio "Indio" Fernández y Julio Bracho, así como los actores Fernando y Andrés Soler.
“Afuera de la casona (en Tlalpan), centenares de gente del pueblo se arremolinaba frente al zaguán y cientos de automóviles en larga cola bloquearon las callejuelas cercana a la casa”, se lee en la nota acompañada por cinco fotografías del evento.
Barbacoa, carnitas, mole poblano, tequila, licores extranjeros y agua de horchata y jamaica fue el menú disfrutado en el jardín.