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christian.leon@eluniversal.com.mx
Dice la Biblia que cuando Jesucristo fue crucificado, el cielo se oscureció y una fuerte lluvia cayó sobre Jerusalén.
Este martes, con nubes grises amenazantes que empañaron la calurosa tarde fue como la Ciudad de México recibió a “Dios” y su hijo “Jesús”.
El cine fue el responsable de hacerlo posible, pues a los pies del Teatro Metropólitan desfiló parte del elenco de la nueva cinta de Paramount Pictures Ben-Hur, encabezado por Morgan Freeman y Rodrigo Santoro.
Freeman, quien entre sus múltiples papeles ha dado vida a “Dios” en la película de 2003 Todopoderoso, llegó por segunda ocasión a esta ciudad y a su paso habló de lo cálido que es el público de este país.
“Estoy muy emocionado porque es mi segundo viaje a esta hermosa ciudad, México es muy cálido, he estado en el país en varias ocasiones, pero en otras ciudades. Promover la película aquí es muy emocionante, es algo maravilloso que no me podía perder”, señaló Freeman a su paso por la alfombra de la premier del filme.
Con sus clásicas gafas oscuras y mostrando su sonrisa, el actor afroamericano conquistó a los asistentes, desde adultos contemporáneos como aquellos jóvenes que crecieron viéndolo en la pantalla, algo que Freeman dijo agradecer mucho.
“Me siento feliz con el recibimiento que he tenido, no lo esperaba. Siempre he hecho las cosas que me gustan —Dios, presidentes, estar entre superhéroes—; ahora digo que quiero interpretar aquello que pague dinero —bromeó—, estoy preparado para hacer cualquier trabajo para el cual me llamen, incluso aquí en México, quiero hacer películas”.
Si bien dijo que le encantan las películas de superhéroes y la tecnología con la que son realizadas, reconoció que hay un papel en el que ya no cabe. “¿Ser un superhéroe? No, ya estoy muy viejo”.
En un teatro que emuló uno de los palacios de la antigua provincia romana de Judea pasó Rodrigo Santoro, quien en este remake de la cinta de 1959 da vida a Jesús.
Santoro dijo que, como muchos latinoamericanos, el catolicismo ha marcado su vida y la manera en la que lleva su vida, por ello dar vida al hijo de Dios fue una experiencia única que ha marcado su vida.
“Ha sido indefinible, meterse en un papel como éste me ha cambiado y espero que suceda lo mismo con la gente que vea lo que logramos hacer”.
Durante la premiere mundial de la cinta hubo un momento en que ambos actores, Freeman y Santoro —Dios y Jesucristo—, se abrazaron, posaron para la foto e ingresaron al interior del teatro para ver la épica historia de Juda y su hermano Messala, en donde Morgan da vida a Sheik Ilderim, una especie de Ben-Hur.
El riesgo de una nueva versión. Hacer un remake de un clásico de la cinematográfica mundial podría ser un gran riesgo, sin embargo, para los artífices es una forma en que las nuevas generaciones conozcan la historia de fe y venganza protagonizada en 1959 por Charlton Heston.
En su visita a México para promocionar la cinta que llegará a la salas el próximo 19 de agosto, los actores Rodrigo Santoro, Jack Huston y Toby Kebbell, junto a la productora Roma Downey, hablaron acerca del peso que su nuevo filme tiene y cómo, sin que tengan qué ver credos o religiones, podrá conectar con el público.
“No importa si practicas alguna religión, si crees en algo divino o no, la cinta habla acerca de la fe y el perdón, y eso es algo con lo que todo ser humano se puede identificar, habla acerca de la familia”, detalló Santoro, quien se considera un hombre de fe, más que religioso.
El actor brasileño dijo que el filme no busca evangelizar ni adoctrinar a la audiencia, pero considera que es una historia digna de contar actualmente.
Ese punto también lo comparte la productora Roma Downey, quien dice que el mundo atraviesa una especie de crisis de fe.
“Amamos la película original, es icónica, pero nosotros tratamos de basarnos más en la novela en la que se basa aquella película, creo que es un texto atemporal, que hoy en pleno 2016 aún tiene mucho que decir”.
