Óscar Peluchonneau, personaje de Gael García Bernal en "Neruda", es un tipo aspiracional, obsesivo e inseguro. Hijo de una trabajadora de burdel, carga con un pasado que no lo enorgullece. Por ello, quiere sepultar esos recuerdos con triunfos acordes a altas ambiciones.
Óscar espera obtener grandes logros en su vida. Él quiere ser una figura. Y la manera de conseguirlo es cumpliendo con una misión que le asigna el Presidente Gabriel González Videla (Alfredo Castro): atrapar a Pablo Neruda (Luis Gnecco) cuando éste se da a la fuga, luego de su desafuero como senador y de ser declarado enemigo del estado.
La segunda colaboración entre el mexicano y el director Pablo Larraín se estrenará el próximo 11 de agosto en salas chilenas, a tres meses de su positivo debut en Cannes. La dupla se conoció hace más de cinco años, cuando comenzaron a trabajar en "No" (filme nominado al Oscar a Mejor película en Lengua Extranjera en 2013). Este reencuentro fue, para García “una gran oportunidad”, pues lo llevó a "un viaje al interior" que no esperaba, y que estuvo repleto de poesía.
El reciente ganador del Globo de Oro a Mejor actor de comedia por "Mozart in the Jungle" habla con Emol desde Nueva York, ciudad a la que llegó para rodar la tercera temporada de la serie.
Tu personaje siente que debe demostrar lo que vale. Arrastra complejos y hasta se inventa un pasado para sentir que es digno, pero a la vez es gracioso. ¿Cómo te enfrentaste a la construcción de este personaje desde una mirada lúdica, pero a la vez dramática?
- Pues así siempre es con Pablo (Larraín). Por eso me encanta trabajar con él. Todos los actores que suelen trabajar con él, y yo en particular, sentimos que hay una sincronía para abordar las cosas desde una perspectiva quizás diabólica. Nos podemos reír del drama de la vida, y eso es un gran punto de partida, porque de ahí surgen unos personajes muy reales y extraños. En este caso, el personaje del policía es diametralmente opuesto a un poeta. Y eso es quizás lo que hace que se fascine y se sienta apasionado por él. Es una persona que no tuvo la oportunidad que tuvo Neruda.
El protagonista de aclamados filmes como "Amores perros", "La mala educación" y "La ciencia del sueño" interpreta en "Neruda" a un policía que realmente existió, pero que en la ficción es reconstruido por completo. El único elemento real que se mantiene es el nombre. Es importante destacar este punto, pues en los últimos días algunos cercanos a Neftalí Reyes cuestionaron la "veracidad" de lo expuesto en la historia. Fue el caso de Victor Pey, otrora consejero de Salvador Allende y amigo del autor, quien publicó una carta en El Mercurio para referirse a las supuestas imprecisiones de la cinta.
Pero esto no es un documental. Es una obra de ficción. Y si bien hubo un extenso proceso de investigación, el guión de Guillermo Calderón ("El Club") plantea una visión propia de cada personaje. Y es por eso mismo que el poeta expuesto en pantalla es más mujeriego, más fiestero y más egocéntrico de lo que dictan los libros sobre su figura. Óscar Peluchonneau realmente existió, pero la película sólo utiliza el nombre. El resto es ficción.
¿Cómo te aproximaste al verdadero Oscar?
-Fue el guión, la interpretación y todo lo que hablamos y sugerimos. El momento en que el personaje adquiere una biografía donde él es hijo de una prostituta, es algo que surgió días antes de empezar a filmar. Y surgió porque yo necesitaba que se entendiera más el resentimiento, se entendiera más la situación de paria, y cómo de alguna manera él y Neruda son lo mismo. Vienen del mismo lugar, nada más que tomaron caminos distintos. Humanizamos al personaje, pero no de manera burda y fea. No sacamos provecho de eso, al contrario, es un marco para que el personaje esté más presente, con los pies en la tierra. García Bernal llegará a Chile el próximo 5 de agosto al país para promocionar el filme.
cvtp
