Más Información
Gabinete de Seguridad presenta informe de resultados contra el crimen organizado en Sinaloa; suman 99 detenidos
Rubén Rocha pide ser sometido a revocación de mandato, tras resolución del IEES; “es una ideología de la 4T”, argumenta
Sheinbaum: Agencia de Transformación Digital busca evitar corrupción en ventanillas; va por creación de Llave MX
Blake Lively, de rojo, y Kristen Stewart, de blanco, fueron hoy las primeras estrellas del Festival de Cannes en mostrar su estilo ante los fotógrafos y en una abarrotada rueda de prensa para presentar "Café Society", de Woody Allen.
Lively disimulaba su embarazo -está esperando su segundo hijo con su marido Ryan Reynolds- con un mono rojo de tirantes y se mostró muy sonriente junto a una más seria Stewart, que llevaba falda tubo y top blanco, con altísimos tacones.
Dos estilos diferentes y no solo en el vestir. Mientras Lively estaba encantada y posaba con seguridad ante los fotógrafos, Stewart se mostró más huidiza e incómoda.
Destacó además por su peinado, que ya lució en la reciente gala del MET, con el pelo teñido de rubio platino pero con las raíces de su negro natural bien a la vista, un corte muy a la moda.
Junto a ellas, un Jesse Eisenberg mucho más discreto, pero que mostró una gran complicidad con Woody Allen en la rueda de prensa.
Eisenberg fue el encargado de repetirle a Allen las preguntas de los periodistas, ya que el realizador, de 80 años, mostró fuertes problemas de audición.
Lo que no le impidió bromear sobre ello: "Llevo audífono y encima me he tenido que poner los cascos para escuchar la traducción y sigo sin escuchar absolutamente nada", afirmó muy serio.
Un problema consecuencia de su edad, algo que tampoco parece importarle mucho al realizador neoyorquino.
"Tengo ochenta años, no puedo creerlo, me siento joven", dijo Allen, que señaló que come bien y hace ejercicio pero reconoció que su buen aspecto se lo debe a la genética heredada de sus padre. "Me tocó el gordo", aseveró.
Aunque también aventuró que un día se levantará por la mañana, le dará un ictus y se quedará en silla de ruedas. Pero, hasta que eso suceda, afirmó: "seguiré haciendo películas".
"Café Society" es la película encargada de abrir hoy la 69 edición del Festival de Cannes.
Una película presentada fuera de competición en un festival al que Allen es asiduo, pero en el que solo ha participado en la lucha por la Palma de Oro una vez, en 1985, con "The Purple Rose of Cairo".
En esta ocasión presenta "Café Society", ambientada en los años treinta, entre el mundo del cine en Hollywood y el de los clubes nocturnos de Nueva York, una película recibida con aplausos en Cannes su primera proyección para la prensa.
rad