Hay quien dice que Leonardo DiCaprio es uno de los grandes olvidados de los Oscar. No por falta de nominaciones, que contabiliza con la de este año cinco, sino porque en las anteriores se ha ido con las manos vacías.
Pero no es algo que, al menos públicamente, le preocupe a este angelino de 43 años.
Ahora mismo diversas publicaciones cuestionan que su personaje del cazador herido por una osa y dejado por muerto, le pueda dar el Oscar como Mejor Actor.
La revista Vanity Fair subraya el hecho de que que anteriormente ha ganado globos de Oro por El lobo de Wall Street y El aviador (como ahora) y el Oscar se le fue de la manos.
El sitio de E! Entertainment entrevista a varios críticos y estos colocan a Eddie Redmayne (La chica danesa) como el triunfador, por su personaje de travesti y aduciendo que muchos votantes superan los 60 años de edad, teniendo la preferencia por premiar a las minorías.
“Para mí es interesante (la nominación) porque es fantástico ser reconocido por tus colegas, en esta película todos trabajamos duro para hacer una pieza de arte única; nosotros hacemos todo el trabajo y depende de otras personas si la película merece el premio o no”, subrayó DiCaprio durante su visita a México, en enero.
“La razón por la que trabajas con alguien no es por ganar un Oscar o premio, sino porque son artistas fantásticos y (González Iñárritu y Lubezki) han hecho películas que van a entrar en muchas generaciones, que van a permanecer por años y en esta aventura te puedes sumergir en la naturaleza, algo totalmente nuevo y es lo mejor que puede hacer la película”, agregó en aquella ocasión ante la prensa.
El realizador mexicano respaldó a DiCaprio ese mismo día. Aseguró que la cinta estaba planeada antes de Birdman, la cual marcó el renacimiento de Michael Keaton en la primera línea de Holywood, ganando el Oscar como Mejor Actor.
“Pero los compromisos de Leonardo la fueron posponiendo”, expresó.
Los más mencionados. Tras dar a conocer cómo quedaban las ternas por la estatuilla dorada, en redes sociales y entre críticos cinematográficos, comenzaron a mencionar aquellos quienes, desde su opinión, tuvieron que ser considerados.
De acuerdo con un análisis realizado en su momento por la empresa de tendencias digitales Amobee Brand Intelligence, las ausencias más impactantes fue la de Idris Elba, actor británico y negro, así como la cinta que protagoniza, Beasts of no nation, que consideraban segura.
En conferencia posterior, el actor Sylvester Stallone reconoció que había sido sorpresiva la no mención de su compañero en set, Michael B. Jordan, protagónico de Creed, como Mejor Actor, por su calidad.
Ridley Scott, veterano realizador de Misión rescate y quien había estado peleando en los Globos de Oro, el Bafta y el Director’s Guild, fue ignorado por la Academia.
Un caso similar fue el de la tapatía Patricia Riggen, quien por su trabajo en Los 33, sobre los mineros atrapados en Chile y protagonizada por Antonio Banderas, era favorita de medios de comunicación como Entertainment Weekly, que la colocaban como fuerte candidata.
La cinta andina El clan, de Pablo Larrain, ganadora del Oso de Oro de Plata en Berlín, nominado al Globo de Oro y triunfador del Fénix, a lo Mejor del Cine Iberoamericano, no alcanzó nominación a Mejor Película en Lengua Extranjera, que muchos esperaban.
Pablo ya había sido nominado en 2013 vía No, con el actor tapatío Gael García Bernal.
Will Smith a quienes muchos alabaron por Concussion, también quedó fuera.
