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El estreno en salas de la película de Natalie Portman Jane Got a Gun, un western que tiene en su elenco a Ewan McGregor está resultando tan desastrozo como fue la producción de la cinta.
La película tuvo importantes cambios de elenco, perdiendo a sus protagonistas luego de que renunciaran Michael Fassbender, su reemplazante Jude Law y la tercera opción: Bradley Cooper.
Para empeorar las cosas, la directora Lynne Ramsay dejó el set el primer día de rodaje, algo que retrasó el proceso debido que fue necesario que se hiciera un receso para que el nuevo director, Gavin O'Connor, se hiciera cargo del proyecto de la manera adecuada.
Obviamente, luego hubo problemas legales con Lynne derivados de su salida. Aparte de esto, sufrió cambios en su fecha de estreno.
"El rodaje fue muy desafiante", dijo la actriz, quien también es productora de la cinta, a "Vogue" durante el estreno esta semana. Y las dificultades parecen no terminar.
Ahora, según informa el medio especializado "The Hollywood Reporter", el filme podría convertirse en el peor estreno de la actriz ganadora del Oscar por "El cisne negro".
Hasta el momento, la película de 25 millones de dólares ha recaudado alrededor de 831 millones de dólares, una bajísima suma tomando en cuenta que está en mil 200 pantallas. Y aún si la cinta consigue mejorar sus cifras, la película no ha conseguido buenos resultados en críticas: tiene un escaso 40% de aprobación en el sitio Rotten Tomatoes.
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