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Sidney.— En el inicio de la cinta Los ocho más odiados, Quentin Tarantino deja más que claro que es la octava película que dirige.
Con estos guiños a que sólo realizará 10 películas en su carrera, el director confesó, durante el estreno de su nueva cinta en Nueva Zelanda, los motivos para tomar esta decisión. “He dedicado mi vida entera a mis películas. No lo cambiaría por nada.
“He tenido una vida muy feliz. Pero no tengo esposa, no tengo hijos, ni nada que me distraiga”, explicó Tarantino a Radio New Zealand.
El director estadounidense añadió que su trabajo exige “un alto grado de concentración” que no está seguro de poder mantener más allá de 10 películas, y que no tiene otras motivaciones, fuera de las artísticas, que le impulsen a seguir una carrera.
“Se trata de películas, no de tener un oficio. He tenido la fortuna de vivir la vida de un artista en una profesión en la que es muy duro hacer esto”, dijo.
Tarantino asistió el miércoles al estreno en Auckland de Los ocho más odiados, ambientada una década después de la Guerra Civil estadounidense, y que recrea la violencia característica del cineasta.
Es protagonizada por Samuel L. Jackson, Kurt Russel y Jennifer Jason.
Destaca la labor de Zoe Bell. Tarantino destacó la labor de la actriz y doble de riesgo neozelandesa Zoe Bell en el estreno en Auckland de Los ocho más odiados, informaron medios locales.
Bell, quien ya ha trabajado con Quentin Tarantino como ella misma en el filme A prueba de muerte (2007), interpreta en Los ocho más odiados al personaje Judy seis caballos, que alude a su habilidad para conducir una carruaje con seis bestias.
Tarantino comentó al público antes del estreno, el miércoles, de su octavo largometraje que Bell es “un increíble espécimen físico” y recordó que ha estado trabajando con ella desde sus filmes Kill Bill, en los que la actriz neozelandesa se desempeñó como doble, según Radio New Zealand.
