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Angelina Jolie. La actriz estadounidense confesó en el año 2008 que no le llama la atención ver sus películas. "Nunca me ha gustado verme", aseguró a MTV cuando estrenó la película El sustituto bajo la dirección de Clint Eastwood.
James Cagney. Este emblema de la época dorada de Hollywood dijo en más de una ocasión que sentía "terror" ante la idea de verse en pantalla. Pese a no evaluar su propio trabajo, logró pasar a la historia del cine y ganó el Oscar en 1943 por Yanqui Dandy.
Jared Leto. "La verdad es que aún no he visto la película. De hecho, pedí un equipo para irme a escalar y no tener que verla", dijo Jared Leto en plena difusión de la cinta que lo hizo ganar el Oscar a Mejor Actor de Reparto en 2013, El club de los desahuciados. El actor sorprendió en aquel entonces con su declaración, pues la crítica ya había aplaudido su puesta en escena.
Johnny Depp. El estadounidense confesó no ver sus películas en 2013, después de lanzar El llanero solitario. "Tomé una decisión hace mucho tiempo, y es que no veo mis películas. Es una pena porque me pierdo el trabajo de un montón de amigos", aseguró en aquel entonces.
Julianne Moore. Hace tres años la ganadora del Oscar sorprendió al declarar a un diario británico: "No he visto ninguna de mis películas...no me puedo sentar en una premiere ni nada por el estilo"...todo un logro considerando que siempre acude a la primer proyección de sus filmes.
Marlon Brando. Existe una especie de "mito" respecto a la relación de Brando con sus películas. Su círculo íntimo decía que el actor tras Vito Corleone no veía sus filmes, pero él nunca confirmó que efectivamente fuese así.
Matthew Fox. "En realidad nunca me veo...nunca vi un episodio de Lost", dijo en una mesa redonda de los Emmy 2010 el actor que interpretó a Jack Shepard en la serie de J.J. Abrams. "Me encantaba la historia, entendía todo por el guión, pero no me siento cómodo mirándome", contó meses después de la emisión del capítulo final.
Michael Caine. "Primero, elije los buenos papeles. Si no te ofrecen ninguno, elige los mediocres. Y, si los mediocres no llegan, elige los que pagan bien", dijo en una oportunidad el actor británico para explicar por qué a veces participa en proyectos desastrosos, como Tiburón, la venganza. Caine admitió que nunca tuvo intenciones de ver esa película, y que la grabó para construirse una casa.
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