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En un año Sandra Bullock ha pasado del cielo al infierno en cuestión de taquilla. El año pasado la actriz se convirtió en la mejor pagada de Hollywood con 51 millones de dólares gracias, sobre todo a los ingresos por Gravity, la película del mexicano Alfonso Cuarón que generó más de 700 mdd.
Con este antecedente, el fin de semana se estrenó la nueva película de Bullock, Our Brand in Crisis, producida por George Clooney, su co protagonista en Gravity. La mezcla parecía garantizar el éxito en taquilla pero lo que obtuvieron fue una crisis en la que la distribuidora salió a echarse la culpa.
La cinta, un thriller político acerca de una intervención de EU en las elecciones en Bolivia, ganó apenas 3.7 millones de dólares. Fue la número siete en la taquilla y marcó, según The Hollywood Reporter, el peor estreno en la historia para Sandra Bullock en EU.
“Los resultados del fin de semana son terribles”, admitió ayer mismo Sue Kroll, presidente de mercadotecnia de Warner Bros. “La actuación de Sandy fue genial. Adoramos nuestra relación con ella. Lamentablemente la campaña de publicidad no logró conectar con el público”.
Con 11.4 millones de dólares The Martian repitió por quinta semana en la cima de la taquilla.