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cesar.huerta@eluniversal.com.mx
Hubo un tiempo, a fines de los 40, que una familia mexicana fue seguida por milones de personas en cines, durante las tres entregas que requirió para contar su historia.
De la mente de Ismael Rodríguez salió la trilogía de Nosotros los pobres, Ustedes los ricos y Pepe el Toro, protagonizadas por Pedro Infante, que aún siguen proyectándose en televisión y que llenaban las salas destinadas para 3 mil asistentes.
Pero el realizador no se conformaría con ello y, un año después de filmar la primera de esa aventura (1949), se aventó al ruedo para filmar, el mismo tiempo, la vida de don Cruz Treviño Martínez de la Garza y su hijo.
Fernando Soler e Infante dieron vida a La oveja negra y No desearás la mujer de tu hijo, esta última dándole el Ariel como Mejor Actor, al primero.
“Se aventó la locura de hacer dos películas al mismo tiempo, cambiando sólo de set a set, nadie lo creía”, recuerda la actriz Irma Dorantes.
El mismo Rodríguez intentó en los 90, ya en la recta final de su carrera, una trilogía bajo el título Reclusorio, que reunió a los actores de la década como Ignacio López Tarso, Kate del Castillo y Carmen Salinas.
René Cardona Jr, quien había llevado a puerto Tintorera y Supervivientes de los Andes, descubrió que una cámara escondida podía dar mucho y lo mostró con La risa en vacaciones.
El proyecto, que se mantuvo de 1988 a 1996, entregó ocho películas, teniendo como base a tres actores que se hacían pasar por trabajadores o huéspedes de un hotel ubicado en el puerto de Acapulco.