Más Información
Osiel Cárdenas, exlíder del Cártel del Golfo, recibe auto de formal prisión; enfrentará juicio por homicidio
Jóvenes mexicanos pasan más de 2 mil horas al año en el teléfono; OCDE alerta sobre su impacto en la salud mental
Sergio Gutiérrez Luna destaca aprobación de 25 reformas en la 66 Legislatura; "Un logro histórico para la 4T", señala
Secretario de Agricultura reafirma defensa del maíz blanco; "Seguiremos apoyando la producción nacional no transgénica", afirma
¿Maíz transgénero? Rubén Rocha corrige desliz durante discurso en Sinaloa; destaca importancia del maíz blanco
Sheinbaum asegura apoyo total a Sinaloa para enfrentar violencia; "Nunca los vamos a dejar solos, aquí está la presidenta"
Fue un escándalo cuando en 1955 Ana Luisa Peluffo apareció desnuda en la cinta "La Fuerza del deseo" , Peluffo interpretó a Silvia, una modelo que usó su belleza para enloquecer a dos hombres.
La cinta dirigida por Miguel M. Delgado, cuenta la historia de una modelo de desnudos que trabaja en una academia, y que sostiene una relación amorosa con Ricardo (Abel Salazar) y propició la obsesión de su maestro (Armando Calvo), lo que provoca un conflicto que termina en tragedia.
A Ana Luisa Peluffo, actriz de cabaret, cine, teatro y televisión, se le atribuye el primer desnudo en el cine mexicano; nació en Querétaro en 1929, debutó en la película estadounidense “Tarzan y las sirenas” (1948) con un rol pequeño, para luego estrenarse en México con “La venenosa” (1949).
“Mi cuerpo no era maravilloso pero sí estético” dijo a la revista “Somos” sobre su aparición en "La Fuerza del deseo", la cual le valió críticas y descalificaciones, pues muchos consideraron su desnudo como una desvergüenza.
"Debo decir que hubo muchas críticas. En la calle me reclamaban: '¡Qué barbaridad, qué desvergüenza!' Mi padre llegó a decir: '¡Qué cosa tan espantosa!' Claro que mi mamá le decía que había sido una decisión mía, sin presión de ningún tipo y menos por tratarse de conseguir dinero. Era un desnudo estático y estético, sin provocación, como la modelo de un pintor. Sólo así se pudo exhibir", contó la actriz en una entrevista a EL UNIVERSAL.
Pero esta actuación también le trajo aplausos de sectores que vieron con buenos ojos su desafío a la censura de la época.
"También me llovieron felicitaciones y, lo más importante, se abrió un mercado para el cine mexicano en Europa y pude filmar en Italia, España e Inglaterra. Esas películas quitaron las vendas de nuestro cine y se hizo más realista", reconoció Ana Luisa.
Esta hazaña del desnudo la repitió en cintas como "El seductor"(1955), "La ilegítima" (1956) y "La Diana Cazadora" (1956), por esta última surgió el mito de que su cuerpo había inspirado a la escultura del mismo nombre que se encuentra en Paseo de la Reforma.
Peluffo también participó en comedias y melodramas como "Chiquidrácula" (1956) y "Los Olvidados" (202); con seis matrimonios, más de 200 películas, un centenar de obras de teatro, shows, telenovelas y dos Diosas de Plata, Peluffo ha construido unas de las carreras artísticas más sólidas en México.
rad