Los investigadores en París se centraban el martes en una posible trama interna en el robo de joyas valoradas en más de 10 millones de dólares a Kim Kardashian West, tras detener al chófer que la llevó ese día y al hermano del conductor.
Tres funcionarios de París confirmaron bajo condición de anonimato que el conductor y su hermano menor se encontraban entre las 17 personas detenidas. Michael Madar, de 40 años, y Gary Madar, de 27, trabajaban para la misma compañía, según dos de los funcionarios.
Los sospechosos tenían de 23 a 72 años e incluían a varias personas conocidas por otros robos y delitos previos, según un documento policial al que tuvo acceso Associated Press.
Los funcionarios no entraron en detalles sobre cómo creen que se planeó el robo. El guardaespaldas de Kardashian West se había marchado durante la noche y los ladrones se abrieron paso a la fuerza hasta el apartamento privado donde se alojaba la víctima, la ataron y huyeron con las joyas.
La estrella rompió su silencio sobre el caso en un adelanto del reality show de la familia Kardashian, en el que decía a dos de sus hermanas lo que había pensado durante el asalto: "Van a dispararme por la espalda. No hay salida".
Una portavoz de la estrella dijo no tener comentarios tras las detenciones del lunes.