En Argentina, la muerte de Carrie Fisher se sintió con pesar en las redes sociales. “Carrie Fisher tuvo la suerte y la desgracia de encarnar un ícono, en una película que se convirtió en uno de los grandes éxitos de taquilla en la historia del cine”, dijo a este diario Axel Kuschevatzky, el productor de 'El Secreto de sus ojos', la película de Juan José Campanella que ganó el Oscar a la Mejor Película Extranjera en 2010.
“Star Wars fue una película amada y cuestionada a la vez, por haber sido iniciadora de un modelo de marketing salvaje. Fisher lo manejó como pudo, y en su adultez tuvo mucha ironía e inteligencia. Para todos quedará esa figura heroica que encarnó, que en la primera película era una fugitiva y que, con el paso de las secuelas, se volvió una rebelde”. Kuschevatzky, también guionista, agregó: “Para una generación entera de varones heterosexuales que hoy tienen más o menos 45 años, verla en El regreso del Jedi con ese bikini dorada también va a ser una imagen inolvidable”, en referencia al atuendo que en se filme vistió su personaje de la princesa Leia.
Por otro lado, el director, actor y crítico Sebastián de Caro opinó que Carrie Fisher ya tenía la genética y la tradición de Hollywood, y que fue una actriz correcta, generosa y carismática. “También, una muy interesante mujer del espectáculo con opiniones fuertes y sagaces, con muchísimo humor”, dijo a EL UNIVERSAL. “Su desaparición física es muy angustiante porque es un personaje relacionado a nuestra infancia y, de alguna manera, es un mito formativo. Con ella muere la infancia de uno: ese es el dolor más grande”.
ml