Más Información
TEPJF batea impugnaciones contra convocatoria y "tómbola" de elección judicial; ordena al Senado regular juzgadores sin adscripción
IMSS Bienestar instala mesa para solucionar conflictos laborales; se compromete a pagar en un plazo no mayor a 4 meses
Alito Moreno se reúne con Julio María Sanguinetti, expresidente de Uruguay; buscan fortalecer lazos en América Latina
Inai busca participar en elaboración de leyes secundarias de Transparencia; “queremos incidir en la nueva legislación", piden comisionados
Detención de “El Cholo Palacios” clave para esclarecer Caso Ayotzinapa, afirma Alejandro Encinas; testimonio podría revelar paradero de estudiantes
Por Ariel León Luna
christian.leon@eluniversal.com.mx
Hace 12 meses Ana Torroja se encontraba en su casa de España, disfrutando de las labores que ser madre y esposa implicaba, sin imaginar que un año más tarde su vida la llevaría a dividirse entre dos continentes y que sería México el país que la haría regresar a los escenarios y replantearse regresar definitivamente a la música.
“Antes de este disco no sabía si quería seguir dedicándome a la música o ser ama de casa y mamá, llegó esta idea de hacer el disco acá y me pareció increíble y ahora lo que disfruto es que no me tengo que plantear nada, muchas veces cometes el error de pensar mucho en el futuro cuando lo único que hay es el presente”, expresó en entrevista con EL UNIVERSAL.
Ana aseguró que esta idea de estar abierta ante lo que se presentara en su vida hizo que fuera la tierra del mariachi y el tequila la que la sacara de su letargo artístico.
Ahora la tiene de regreso gracias a su disco en vivo y que a su vez ese despertar le abriría nuevos proyectos que la mantendrían más tiempo en este país y con ello su corazón se dividiría en dos.
Por un lado, agradecida por el éxito que su disco Conexión ha tenido y la respuesta que el público ha tenido con él, lo cual la llevará a emprender una gira por México, pero por el otro Ana está con el corazón en España, donde se encuentra su familia.
“Las cosas van llegando y te vas sorprendiendo, lo tienes que tomar como regalos que da la vida y disfrutarlo al máximo, antes, soy una persona que disfruta de lo que hace, cuando me toca trabajar lo hago exhaustivamente y cuando me toca descansar también lo hago, yo creo que todas las cosas que van llegando aunque sean inesperadas hay que tomarlas como un regalo, estar agradecidos con ellos, y México me está dando tantas nuevas alegrías”, detalló.
Añeja relación
Esta relación estrecha y familiar —como ella la describe— que tiene con este país no es nuevo, pues Ana recordó que fue México uno de los primeros países que le abrió su corazón cuando inició su etapa solista tras salir de Mecano.
En esa etapa —explicó Torroja— nadie creía en su carrera en solitario, ni ella misma daba un peso por su esa nueva faceta artística, incluso hasta dudaba si seguiría en el negocio musical.
“Una de las cosas que mas valoro es la fidelidad, el que el público ayude a que uno siga aquí, para mí eso es importante, porque cuando decidí empezar mi faceta solista tras Mecano no yo daba un duro por mi cuando decidí hacer el primer disco sola, pensé que haría ese disco porque quería pero nunca pensé que estaría más tiempo como solista del que estuve con el grupo”, dijo.
La ex Mecano explicó que sus dudas estaban relacionadas a la manera en la que el público tomaría su nueva faceta sin el grupo y no a si podría hacer un buen trabajo o no.
“Para Torroja, la duda tenía que ver con de dónde venía, es decir del grupo más importante de la historia de la música española y estoy muy consciente de que yo sola soy otra cosa, entonces no sabía si eso a la gente le iba a gustar. Pero ahora sé y estoy convencida de que me quiero morir con la botas puestas”, detalló.
Nunca pensé que iba a llegar este disco, estaba en un momento en que dudaba si seguir y ahora sé que quiero morirme con las botas puestas, porque lo único que sé es que no se nada.
“Creo que hay que aprender a no esperar, a no tener tantas expectativas y mejor disfrutar de lo que te toque en cada momento, sin pensar en la meta ni en el final, las cosas llegarán. No creo que nadie quiera fracasar aunque es necesario, la vida está llena de curvas y para valorar el éxito hay que fracasar”, añadió.