Si bien Uber es un servicio de mucha utilidad para los viajeros, hay algunas ciudades donde no está disponible, obligando al turista a buscar otras formas para desplazarse.
Es el caso de Barcelona que hasta hace unos días era la única gran ciudad de Europa que no contaba con este sistema.
Además de no responder a las exigencias legales, muchos consideran que Uber no es necesario, ya que movilizarse por las calles la comarca del Barcelonés no es problema, ni lo es ir de un lugar a otro. Barcelona es un destino amigable, que invita a caminar sus avenidas y a descubrir su Barrio Gótico, la Sagrada Familia o las casas de Gaudí.
Lo mismo pensaron los habitantes de Dinamarca que decidieron decirle adiós a este sistema de movilización por no adecuarse a sus normas de transporte.
Hacer "turismo a la antigua" no es tan complicado; solo se necesita un buen par de tenis o zapatos para lanzarse a recorrer los rincones más entretenidos de una ciudad.
Nunca está demás enterarse de cómo funciona el transporte público si se pueden comprar pasajes unitarios o si se necesita de tarjetas para subirse al transporte colectivo.
Italia es otro destino que le dijo “addio” a Uber el 7 de abril, luego de que un fallo judicial los acusara de competencia desleal, por lo que ordenó su cese de funciones durante los 10 días siguientes tras ser concluida la resolución.
No te preocupes, las principales ciudades de Italia son un verdadero placer recorrerlas a pie y tiene muy buenos servicios de transporte.
Otro destino sin Uber es Vancouver, Canadá, donde el servicio es ilegal; una metrópolis que figura como uno de los mejores lugares para vivir en el mundo.