Conocer el mundo vegetal no tiene que ser aburrido ni necesariamente implica permanecer quieto en un salón de clases.
Jardines de México se lo demuestra a tus retoños a través de las actividades del pabellón “Consentidos”.
Se montó una célula gigante que se puede explorar. Una vez dentro, los niños deben entender su funcionamiento para salvar la planta de una bacteria.
Pero la atracción favorita es el mariposario. No solo es posible hallar algunos ejemplares y liberarlos, sino observarlos desde que están en el capullo. Si se quedan fascinados con los insectos, hay una sección donde se aprecia el trabajo de las hormigas.
En fin de semana, se realizan talleres para crear minijardines con elementos reciclados e instrumentos musicales con materiales de la naturaleza, como troncos y bambú.
El resto de los jardines también es amigable con los niños. El Laberinto de los Sentidos es una de las mejores áreas para llevarlos. Sus muros de vegetación ocultan obras de arte.
Costo de entrada: 275 pesos por adulto y 225 por niño.
Web: jardinesdemexico.com