El sábado 11 de marzo abrirá sus puertas un pequeño hotel boutique en la ciudad palestina de Belén, de solo 10 habitaciones, cuyas ventanas dan al muro y alambrada que divide de Cisjordania, por lo que sus creadores han asegurado que tiene "la peor vista del mundo".

Este servicio de hospedaje ya cuenta con decenas de viajeros que están ansiosos de concretar sus reservas, lo que augura un futuro prometedor. Su interior fue decorado por la misteriosa superestrella británica del grafiti urbano Banksy, artífice de esta idea y quien que se ha dado a conocer por sus obras que contienen ácidas críticas a las políticas adoptadas por Israel en contra de Palestina.

El establecimiento, cuyo gerente es Wisam Salsaa, fue llamado The Walled Off Hotel (hotel amurallado) y cuenta con una habitación que lleva el nombre del artista callejero: en las paredes aparece un soldado israelí y un palestino enfrascados en una guerra de almohadas.

Este hotel también fue diseñado por otros artistas urbanos como Dominique Petrin y Sami Musa. Desde una de sus habitaciones, incluso, se puede observar una torre de vigilancia israelí. Como todo respetable hotel, también cuenta con una suite presidencial en el último piso; ofrece un jacuzzi y una gran cama de color rojo, además de una pequeña sala de cine y un bar.

Cada una de las habitaciones está decorada con obras originales del artista británico, llegando a ser verdaderas instalaciones de arte. El establecimiento da la bienvenida a los visitantes asegurando que tiene la peor vista del mundo y como contrapartida se añade: "por favor, cuide el arte de las paredes que tiene un valor millonario". Quizás por esa razón, dijo Wisam Salsaa, es que no pierde la esperanza  de que algunos israelíes quieran hospedarse en la propiedad.

El hotel fue habilitado durante 14 meses en completo sigilo; ni siquiera las autoridades palestinas estaban al tanto de su existencia hasta que abrió sus puertas extraoficialmente a la espera de su inauguración formal.

En su interior, tal como relató el diario británico The Telegraph, se observa un diseño que se asemeja a un club colonial, con mullidos y cómodos sofás de cuero y delicada porcelana. Banksy rara vez ha hablado de su obra y hasta la actualidad su verdadera identidad es desconocida. Esto le ha permitido viajar varias veces a Cisjordania donde incluso pintó, escondido de la autoridad, una porción de este muro con una de sus obras más conocidas, que retrata a una niña que se eleva el suelo con ayuda de globos de helio. The Walled Off Hotel recibe a todos los viajeros que lo deseen y las tarifas por noche, por habitación, parten desde 30 dólares.

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