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Aclamado por muchos como el número uno del futuro y reciente campeón en el torneo de Roma, el alemán Alexander Zverev sufrió un frenazo en seco al caer en la primera ronda del Abierto de tenis de Francia.
Zverev, décimo del ranking con apenas 20 años, perdió con el español Fernando Verdasco por 4-6, 6-3, 4-6 y 2-6 en su primer partido desde que alzara hace diez días en Roma su primer gran título. El duelo comenzó el lunes pero se suspendió por lluvia.
Su derrota fue la gran sorpresa de una jornada en Roland Garros en la que el británico Andy Murray, el suizo Stan Wawrinka y el japonés Kei Nishikori, tres de los grandes favoritos para alcanzar la final por la parte alta del cuadro, superaron sus respectivos debuts con más sudores de los previstos.
“Jugué basura, así de simple”, dijo, tajante, Zverev luego de su tropiezo en la arcilla de París. “Sólo dependió de mí. Es una pena que haya jugado así de mal en un Grand Slam”, lamentó el alemán, que cometió 50 errores no forzados durante las dos horas y 53 minutos de partido.
Con su corona en Roma, Zverev se confirmó como la gran promesa del tenis internacional. En la final de la capital italiana derrotó al serbio Novak Djokovic y después irrumpió en el top ten. Además, está en el cuarto puesto del ranking anual. ¿Demasiada presión? Su compatriota Boris Becker cree que sí.
“Es el número diez del mundo, ha ganado en Roma, todos le tocan el hombro y le dicen: ‘Vas a ser la nueva superestrella’. Y eso uno se lo cree muy rápido cuando tienes 20 años”, dijo Becker.
Verdasco se enfrentará al francés Pierre-Hugues Herbert por un lugar en la tercera ronda.
“Fue un primer set difícil, con muchos games para los dos con oportunidades de ganar”, dijo Fernando.
Murray, número 1 del ranking mundial, venció al ruso Andrey Kuznetsov por 6-4, 4-6, 6-2 y 6-0, mientras que el suizo Stan Wawrinka (3) derrotó sin problemas al eslovaco Jozef Kovalik, procedente de la clasificación, en tres sets, por 6-2, 7-6 (6) y 6-3.
“Había mucho viento y él atacó muy pronto la bola, por eso he tenido que arriesgar y eso me ha llevado a cometer muchos errores”, se justificó Murray, quien no ha tenido un buen año.
