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La vida es como una montaña rusa y eso lo tiene muy claro el gimnasta mexicano Daniel Corral, quien pese a los altibajos de su carrera, ha decidido mantenerse activo, al menos durante este año.
“Sí, he pensado en el retiro, a veces, incluso en los mejores momentos de mi carrera imaginé qué pasaría si decidiera irme, dejar todo. Pero no lo hago porque la gimnasia me gusta, me apasiona”, comenta el originario de Baja California.
Aunque sus resultados no han sido los mejores los últimos años, el medallista mundial no claudica. Con 27 años a cuestas y lesiones que acarrea tras más de dos décadas como seleccionado, Corral le hace frente al ciclo olímpico convencido de que aún puede dar más.
“Desde chico siempre tuve el sueño de conseguir algún resultado significativo, escribir capítulos de éxito en mi deporte. Y lo conseguí; logré cosas históricas para el país. Quiero pensar que al menos he contribuido un poco para el crecimiento de la disciplina”.
En 2012, Corral se quedó cerca de lograr una medalla en los Juegos Olímpicos de Londres, al ubicarse en el quinto lugar. Un año después hizo historia al conseguir la plata en el Mundial de Amberes.
Sin embargo, en la justa veraniega de Río de Janeiro en 2016 se quedó muy corto en sus aspiraciones. El seleccionado ocupó la casilla 38 en la prueba de caballo con arzones y en el 20 en las barras asimétricas, lo que lo dejó fuera de la final de ambos aparatos.
“El éxito me dejó muchas cosas, pero no tanto como las derrotas. Las bajadas son necesarias para adquirir lecciones y aplicarlas en la vida. La falta de resultados a veces se dio por cosas fuera de mi control”.
Este año no hay presión.
“No tenemos competencias clasificatorias. El Mundial es la más importante de la temporada, así que me tomo este año con calma y muy tranquilo. Ya que no hay mucha actividad tengo tiempo de hacer otras cosas como dar conferencias y compartir un poco de mi historia de vida con las nuevas generaciones”.
Daniel ha decidido prepararse esta temporada en México y será de forma autodidacta.
“No regresaré a Londres, pienso quedarme aquí. Llegué a un punto en que estoy en un nivel de maestría, conozco las etapas del entrenamiento, cómo debe ser la práctica. A estas alturas a veces el entrenador es como un mero observador. El próximo año cuando inicie formalmente el ciclo pensaré en tener un entrenador”.
—¿Te ves en Tokio 2020?
—Cuando terminaron los Juegos de Londres sin problema decidí continuar otro ciclo hasta Río de Janeiro. Pero las cosas han cambiado y pensar en cuatro años más suena lejano. Ya tendría 30 años y todo puede pasar. Si fuera por deseos, continuaría, pero esto es un proceso y muchas cosas pueden atravesarse como las lesiones”.
Corral considera que hay suficiente talento para representar a nuestro país a nivel internacional, aunque aún falta mucho para estar a la par de las potencias.
“Veo bien a las nuevas generaciones, pero hay que trabajar mucho y todos los días porque la disciplina está creciendo mucho a nivel mundial. México tiene que redoblar esfuerzos y ponerse a la par para aspirar a buenos resultados”.