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Roger Federer regresó al top 10 del ranking del ATP, mientras que el británico Andy Murray sigue siendo el número uno del mundo.
El título en el Abierto de Australia, el decimoctavo que logra en su carrera, permitió al tenista más exitoso de todos los tiempos ascender siete puestos en el escalafón y ubicarse entre los diez mejores con 3 mil 260 puntos.
Federer, de 35 años, había caído al sitio 17 después de pasar seis meses sin jugar debido a una lesión en la rodilla. Su regreso al circuito, sin embargo, fue fulgurante, pues en Melbourne disputó su primer torneo oficial tras la pausa de medio año.
En sus momentos más difíciles de 2016, cuando dudaba si alguna vez volvería a su mejor forma física después de su agravio, el tenista se aferraba a un pensamiento: todavía tenía el juego para ganar otro Grand Slam. Y tenía razón.
Número uno del mundo durante años, el helvético tenía clavada su cuenta de Grand Slams en 17 desde 2012, cuando había ganado su último Wimbledon. El domingo se impuso en cinco sets a Rafael Nadal, en una nueva edición del gran clásico de los últimos años en el deporte blanco. “Nunca hay una garantía, pero siempre fui positivo”, dijo a la página web del Abierto de Australia sobre cómo superó el largo periodo de inactividad del año pasado. “Se trató de mantener la calma y creer en los frutos del trabajo y en la variedad de mi juego, que tal vez me permitía ganar quizás uno o dos”.
Por su parte, el español, campeón de 14 Grand Slams, también puso fin a su temporada 2016 antes de tiempo por una lesión en la muñeca. Después de cuatro meses parado, el tenista de 30 años regresó también con renovadas fuerzas.
Su subcampeonato en Australia le sirvió para ascender del noveno al sexto lugar de la lista, donde suma un total de 4 mil 385 puntos.
Murray sigue siendo el número uno con 11 mil 540 unidades. Su principal perseguidor, el serbio Novak Djokovic, aún cayó antes en el primer Grand Slam de la temporada y suma 9 mil 825 unidades en el segundo puesto.
