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Houston.— La elección del multimillonario Donald Trump como nuevo presidente de Estados Unidos ha dejado al mundo del deporte profesional tan dividido como al resto del país.
La segmentación se dejó ver de inmediato a través de las redes sociales, en las que destacó el mensaje de ánimo que el basquetbolista LeBron James, de los Cavaliers de Cleveland, envió a través de Instagram a sus seguidores, tras la derrota de la demócrata Hillary Clinton.
Mientras, el quarterback de los Patriots de Nueva Inglaterra, Tom Brady, y su entrenador Bill Belichick trataban de aclarar que su apoyo a Donald Trump no tenía ningún tipo de objetivo político, sino se basaba en la amistad que mantienen con el multimillonario hace años.
A pesar de su aclaración, ambos dieron su apoyo a Trump, el primero con una foto del magnate en el vestuario del equipo desde que el magnate inició la campaña hacia la presidencia, y el segundo con una carta personal que le envió al nuevo presidente electo y que éste leyó en el último día de su campaña.
Junto a James, que apoyó en campaña electoral a Clinton, el más crítico con la elección de Trump ha sido el pasador de los 49ers de San Francisco, Colin Kaepernick, quien desde el inicio de la pretemporada de la NFL realizó una campaña de no permanecer de pie mientras suena en cada partido el himno nacional.
Acción que Trump calificó de “vergonzosa” y tras las declaraciones de Kaepernick en el sentido de que en Estados Unidos no había justicia en el trato a las minorías y sí exceso de brutalidad policial, le dijo que si no estaba feliz con el país en el que vivía que se fuera.
Kaepernick no expresó su opinión personal al conocerse el triunfo de Trump, pero si retuiteó puntos de vista políticos de otros personajes en los que se mostraba la “frustración” y lo “negativo” de su elección para el futuro del país.
James más diplomático y original en su mensaje enviado a través de Instagram aboga por tener toda la confianza en la lucha por un mejor futuro y superar los cuatro años de mandato de Trump con la esperanza de superar el “obstáculo” que se presenta y salir reforzados como mejores personas y sociedad.
El jugador de los Bulls de Chicago, Dwyane Wade, también mostró a través de la redes sociales la incredulidad de que Trump se hubiese convertido en el presidente electo 45 de Estados Unidos.
Tampoco se mostró feliz el jugador turco del Thunder de Oklahoma City, Enes Kanter, que abiertamente había dicho que deseaba el triunfo de Clinton.
Ese ha sido el sentir general de los jugadores de la NBA que han mostrado su reacción a través de las redes sociales, en las que también habían expresado el apoyo a la candidata demócrata durante la campaña electoral.
Tampoco dentro de la NFL fue bien acogido el triunfo de Trump, pues además de Kaepernick, el ex defensa Justin Tuck, de los Giants de Nueva York, cree que el país está dividido.
“Los Estados Divididos de América”, escribió Tucker en su página de Twitter.
Dentro del mundo del beisbol profesional pocas reacciones ha suscitado la elección de Trump, como tampoco las hubo durante la campaña electoral.
Con la excepción del ex lanzador Curt Schilling, que jugó con los Diamondbacks de Arizona y los Red Sox de Boston, y actual candidato republicano a senador por el estado de Massachusetts, sí expresó su felicidad y opinó sobre la candidata demócrata a presidente con un mensaje provocativo.
“Al menos Hillary Clinton no va a pedir un recuento por miedo a que la descubran haciendo trampa”, expresó Schilling.
El presidente del Comité Olímpico Internacional, el alemán Thomas Bach, fue diplomático, quizás porque Los Ángeles es ciudad candidata a albergar los Juegos de 2024.
“Permitánme felicitar a Trump por su victoria y desearle lo mejor para su mandato”, señaló en un comunicado.
