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McLaren puede presumir de haber tenido como campeones mundiales de la Fórmula Uno a los mejores que ha pasado por el serial.
Nombres como Ayrton Senna, Niki Lauda, Alain Prost, Emerson Fittipaldi, James Hunt, Lewis Hamilton y Mika Hakkinen disfrutaron las mieles del triunfo con el equipo de Woking para formar una historia llena de éxitos.
Sólo los bólidos escarlatas de Ferrari los superan en número de títulos en el Gran Circo. Los de Maranello presumen 15 coronas, por 12 de los británicos.
Pero esos tiempos gloriosos parecen cosa del pasado. Desde hace cuatro temporadas están sumidos en una crisis, sin confeccionar un auto competitivo, acorde a su peso histórico dentro del serial.
Por el talento en sus pilotos no queda. Desde hace dos campañas mantienen una formación de dos ex campeones mundiales con el español Fernando Alonso y el británico Jenson Button. Juntos, suman 574 Grandes Premios de experiencia.
Alonso intenta no perder la paciencia. Regresó a McLaren en 2015 tras haber estado en 2007, año que quedó tercero. Su objetivo de dejar Ferrari luego de cinco años era el poder contar con un auto que le diera la oportunidad de volver a coronarse.
Fernando nació en Oviedo. Heredó la pasión por la velocidad de su padre, quien participaba en carreras de karts. Empezó a probar la velocidad en uno de estos autos cuando apenas tenía tres años de edad.
Cuando conquistó su primer campeonato despertó en España lo que se llamó la “alonsomanía”. Hasta ahora es el único ibérico que se ha coronado en la F1.
Button, por su parte, era un piloto más del montón hasta que logró el triunfo en 2009, con el sorpresivo equipo Brawn GP.
Jenson reside en Mónaco. Es amante del ciclismo de montaña. Cuenta con tres tatuajes, entre los que destaca la inscripción de “número uno” en japonés.
Su afición por los deportes lo llevó a ganar un triatlón en California, el año pasado.
Junto con Alonso busca cambiar el rumbo de McLaren y edificar su legado al lado de los mejores pilotos de la historia.
