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El retroceso que sufrió México en el medallero olímpico de Río de Janeiro respecto a lo hecho en Londres 2012, podría revertirse en el próximo ciclo si se empiezan a imitar programas deportivos como los que aplican Colombia o Argentina y que ahora son referentes de América Latina junto con Brasil y Cuba.
Ivar Sisniega, director de la Conade durante el sexenio de Ernesto Zedillo (1994-2000), consideró que el deporte mexicano necesita auxiliarse de una medida similar a la que tiene el gobierno colombiano que desde 1967 estableció el Impuesto Fondo al Deporte que se cobra a los suscriptores de servicio telefónico por intermedio de la empresa que presta el servicio y que se paga mediante un desprendible adjunto a la factura de dicho servicio.
El recaudo de este impuesto se reinvierte en programas, eventos, actividades recreativas, deportivas y del uso de tiempo libre, que benefician a todos los ciudadanos.
“Se necesita de financiamientos para ayudar a los deportistas, no sólo los que consiguen medalla si no también a los que están peleando en la élite mundial. El ejemplo más cercano es Colombia o Argentina, países que tienen impuestos telefónicos que se van directo al deporte o beneficios para los empresarios”, declara Sisniega en entrevista telefónica a EL UNIVERSAL.
Con tres medallas de oro, dos de plata y tres de bronce, los colombianos terminaron en el puesto 23 del medallero de Río de Janeiro, 15 puestos por arriba de lo que hicieron en Londres.
“Vivimos en un país en el que la industria del cine tiene un trato preferencial porque se apoya al cine mexicano. El deporte del que depende la salud, nuestros hijos y de alta competencia no tiene un trato preferencial, fiscal para apoyar al deporte. Creo que se puede imitar lo que se hace en Colombia”, externa el ex dirigente de la Conade.
Por su parte en Argentina, que tuvo su mejor actuación desde 1948, —tres de oro y una plata—, se respaldó el deporte desde el Estado y con el impulso de empresas privadas con becas en efectivo, construcción de infrestructura deportiva por medio de Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD), que está definida por el gobierno sudamericano como “un organismo de composición mixta (ámbito público y privado), de conducción alternada y representación igualitaria, cuyos socios fundadores y coadministradores son la Secretaría de Deporte de la Nación y el Comité Olímpico Argentino” y que también aplican el uno por ciento sobre el abono que las compañías de telefonía celular facturan a sus clientes por los servicios de telecomunicaciones brindados.
Argentina culminó en la plaza 27 al término de Río, mejorando lo hecho en los olímpicos de Londres.
Sisniega sostuvo que falta trabajo en la detección de talento y buscar un grupo con el que se pueda apoyar su carrera, pero desde una edad temprana pues el alto rendimiento no sólo se basa en los deportistas que están en su madurez.
Sin querer opinar sobre el futuro de Alfredo Castillo al frente de la Conade, Ivar Sisniega precisó que es urgente que todos los protagonistas del deporte mexicano trabajen a la par para obtener una mejor cosecha de metales en cuatro años.
“En general es un balance positivo si se toma en cuenta que además de las cinco medallas, se consiguieron varios cuartos lugares y un grupo importante de atletas finalistas. Existen condiciones importantes para mejorar lo que se hizo y esperemos que el deporte mexicano tenga una mejor cara en Tokio, con el trabajo de todos”.