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adriana.reyes@eluniversal.com.mx
Río de Janeiro.— Alguna vez soñó con ser tan veloz como Ana Gabriela Guevara o tan hábil con la cintura como Julio César Chávez.
Siendo apenas una adolescente, Guadalupe González persiguió el sueño de emular a alguno de sus dos modelos a seguir, pero no lo consiguió. Su menudo físico le impidió concretar ese objetivo, aunque ahora puede ver a Julio y a Ana a la misma altura tras conseguir la plata en Río de Janeiro.
Y es que, Guadalupe ingresó al exclusivo club de los medallistas olímpicos mexicanos que por ahora cuenta con apenas 65 integrantes.
La mexiquense alcanzó ayer la cima de una carrera que comenzó casi por casualidad, cuando debido a una lesión, los médicos le recomendaron practicar la caminata para fortalecer sus músculos.
“A mí no me gustaba la marcha ni los movimientos de cadera que se tienen que hacer. Mis amigos se burlaban de mí, pero yo seguí practicando para sentirme mejor físicamente”, recordó González.
Para evitar una operación en la rodilla, Guadalupe mantuvo sus entrenamientos. Entonces conoció a Juan Hernández, quien se encargaría de explotar su talento en los 20 kilómetros. Eran los últimos meses de 2012.
Para sorpresa de todos y de ella misma, en pocos meses, sus tiempos se asemejaron a los mejores del país y muy pronto se convertiría en la mejor exponente nacional de la marcha.
Apenas dos años y medio después de comenzar la rehabilitación, Guadalupe consigue la marca para asistir a los Juegos Panamericanos de Toronto. Pocos le auguraban un buen resultado, debido a su falta de experiencia internacional, pero nuevamente sorprendió al cruzar la meta en primer lugar y desvanecerse tras una severa deshidratación.
A partir de entonces, su carrera fue cuesta arriba hasta convertirla en una de las cartas fuertes que sí cumplió en Río de Janeiro con el compromiso de regresar a casa con una medalla.
Actualmente, María Guadalupe González es la uno del ranking mundial de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) con una marca de 1:26.17 horas conseguida el 7 de mayo durante la Copa Mundial de Caminata realizada en Roma. Y va por más.