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adriana.reyes@eluniversal.com.mx
Río de Janeiro.— El idilio del mandamás del deporte mexicano continúa en Río de Janeiro.
Alfredo Castillo, titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) y la ex reina de belleza, Jacqueline Tostado Madrid aún asisten juntos a los escenarios deportivos de la justa veraniega, a pesar de las numerosas críticas en las redes sociales por una supuesta “luna de miel”.
Ayer, Castillo y Tostado Madrid se presentaron en el Sambódromo, donde la arquera mexicana Alejandra Valencia competiría por una medalla en la modalidad individual.
La pareja llegó al inmueble poco antes de que iniciara el primer duelo de la competidora tricolor y mantuvo una conversación en las gradas por aproximadamente media hora.
Un poco antes de la aparición de Valencia, quien culminó en la cuarta posición, Alfredo y Jacqueline se separaron. Él permaneció en el mismo lugar, mientras que ella se sentó algunos escalones arriba, pero sin perder de vista al titular de la Conade.
Mientras la participación de Alejandra seguía su curso, la pareja del titular de la Conade aprovechaba para tomarle fotos a la distancia.
Durante una pausa de la competencia, Castillo se levantó de las gradas para acercarse a Jacqueline. El dirigente platicó un poco con su novia y se inclinó un poco ante su acompañante, al parecer para darle un beso.
El resto de la competencia, Alfredo siguió con atención el desempeño de la seleccionada nacional; celebró cada una de las flechas perfectas de la sonorense y sufrió con algunos malos disparos.
Culminada la actividad en el Sambódromo, el titular de la Conade bajó a la zona de atletas para charlar con los medios de comunicación y con los padres de Alejandra Valencia, quienes le reclamaron la falta de recursos para que viajara el entrenador de su hija.
De forma discreta, Jacqueline prefirió salir por separado y sola.
Tendencia en redes. Hace unos días el dirigente se convirtió en tendencia en las redes sociales, luego de que su acompañante asistiera a la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos con uniforme oficial de la marca Hugo Boss.
Ante las múltiples críticas, el mandamás del deporte aseguró que la vestimenta y el costo total de su viaje corrió por su cuenta y no salió del erario público.
Castillo se encuentra en el ojo del huracán debido a que la delegación nacional aún no consigue medallas en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Disciplinas como los clavados y el tiro con arco han quedado a deber, aunque el dirigente considera que hasta ahora la actuación de los atletas nacionales no ha sido mala.
