Budapest.— El alemán Nico Rosberg fue el rey del caos en la clasificación del Gran Premio de Fórmula Uno de Hungría y saldrá hoy desde la pole position después de una alocada jornada gobernada por el agua, varios accidentes y las banderas rojas.
El líder del campeonato del mundo le arrebató el primer lugar a su compañero de Mercedes, Lewis Hamilton, en el último suspiro de la Q3 después de que el británico se viera frenado en su vuelta más rápida por un trompo de español Fernando Alonso.
Hamilton, que está a un punto de Rosberg en la clasificación, iba marcando el mejor cronómetro del día en el circuito de Hungaroring cuando Fernando Alonso, que rodaba unos metros por delante, perdió el control de su McLaren y forzó una bandera amarilla, lo que obligó al de Mercedes a pisar el freno por seguridad.
“Me sentía bien en esa vuelta final y estaba cuatro décimas arriba. Tuve mala suerte con Fernando, pero esas cosas pasan”, comentó Hamilton, cuatro veces ganador en Budapest y que hoy partirá segundo. “Aún queda una carrera larga por delante y daré todo”.
“Cometí un error en la chicana y al intentar recuperar hice un trompo”, explicó después Alonso.
Rosberg aprovechó la situación, porque cuando llegó a la zona de la bandera amarilla, Alonso ya había retirado su bólido de la pista. El alemán tuvo que frenar, pero mucho menos que Hamilton y pudo completar su mejor vuelta sin problemas.
“Había banderas amarillas, pero levanté el pie del acelerador y pasé más lento en ese sector que en la vuelta anterior”, dijo Rosberg, que según algunas repeticiones de televisión no frenó en la zona de banderas amarillas.
Los mexicanos Sergio Pérez (Force India) y Esteban Gutiérrez (Haas) no pasaron de la Q2. “Checo” saldrá desde el 13, mientras que “Guti” largará 15.