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Bueno, pues parece que Vanessa Huppenkothen no desea, pero ni tantito, alejarse de nuestro espacio en Barra Brava, pues hasta nuestras oficinas llegó la confirmación de que la guapa conductora está prácticamente arreglada con ESPN.
Cansada de las malas caras y los desplantes en Televisa que la fueron marginando poco a poco de la televisora, Vanessa al fin parece encontrar refugio en la televisión de paga, y nos aseguran que llega con buen cartel, pues gracias a su belleza está considerada para nuevos retos importantes.
Además, nos dicen parece disfrutar eso de encender las redes y no desaprovechará la oportunidad de instalarse de nueva cuenta en los primeros planos entre las féminas más guapas que viven del mundo deportivo.
Conade y NBA buscan prospectos
Lo de impulsar el basquetbol mexicano va en serio por parte de la Conade. Nos aseguran que la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, además de reiterar todo su apoyo a la Selección que competirá en el repechaje olímpico en Turín, no quiere repetir errores del pasado y ya planea con detenimiento el futuro. El órgano rector del deporte en nuestro país junto con la NBA lanzará un programa para reclutar a los mejores 50 jugadores de categoría 1999, 2000 y 2001 con el objetivo de becarlos en el Centro Nacional de Alto Rendimiento durante un año escolar en el cual se concentren en el basquetbol y sus estudios. La NBA se encargará de capacitar a los entrenadores y dar clínicas a los jóvenes y coaches para que mejoren su nivel.
Esgrima lucha por patrocinios
Convertirse en seleccionado olímpico implica algunos beneficios para los deportistas que han conseguido ubicarse entre lo mejor de su especialidad. Uno de ellos es captar la atención de patrocinadores que acompañen su preparación rumbo a la justa veraniega, como esperan las esgrimistas Nataly Michel y Alejandra Terán, quienes hacen un llamado abierto mediante las redes sociales a todas las marcas que quieran respaldarlas durante los próximos tres meses.
Aunque cuentan con el auxilio de su federación, las espadachinas, que apenas superan los 20 años de edad, buscan tener nuevos aliados que les permitan contar con todo lo necesario para llegar en óptimas condiciones a Río.
