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La F1 regresa a México tras 23 años de ausencia de su etapa anterior y a 53 años de la primera vez que pisó suelo mexicano, siempre el mismo Autódromo antes de la Magdalena Mixiuhca, ahora Hermanos Rodríguez, nombrado en honor a Pedro y Ricardo, nuestros pilotos máximos de la categoría.
Esto ha provocado que todos se interesen por el deporte motor y es increíble la cantidad de “expertos” en el tema, y pongo las comillas, porque realmente sólo ellos creen lo que dicen.
El meollo del asunto es que hay una generación que no se entera de las noticias por los medios tradicionales, sino por las redes sociales, y como las redes sociales son meramente opiniones, pues todo mundo opina y, en la mayoría de los casos, en este tema, opinan mal. Pero esa dependencia en redes sociales y en la información de internet se ha vuelto también el caballito de batalla de muchos periodistas modernos que crecieron en el “copiar y pegar” (copy & paste) y redactan sin tener idea de lo que sucedió, sin usar fuentes tradicionales y, ¡Dios no lo quiera!, sin ir a la hemeroteca para consultar la historia cuando no existe mucha bibliografía sobre el tema.
En los últimos meses he descubierto que el Autódromo de la Magdalena Mixiuhca tenía otro nombre y no era Hermanos Rodríguez ni Autódromo de la Ciudad Deportiva, lo cual es totalmente equivocado.
Luego, en un boletín oficial del propio GP descubrí que el primer Gran Premio es el de 1963, y me alegré mucho, pues eso significa que no hubo GP en 1962, Ricardo Rodríguez debe vivir todavía por ahí con sus bisnietos. Y luego en un boletín rojo, pero de pena, vi que los F1 eran meros autos de Fórmula Junior y que la peraltada estaba en las eses, y además de que Ricardo sigue siendo confundido con Pedro en las fotos, pues los expertos, cuyos padres fundaron el club RODA, no saben reconocer a uno del otro. Y también en una revista que se expande encontré que Adrián Fernández es nuestro último piloto de F1, lo cual no debe tener contento a Sergio, pues hasta eso le quiere quitar Adrián. Y en otra revista de iniciales supe que el GP de 1970 se había cancelado porque hubo un muerto a raíz de los disturbios, por lo que creo que el escritor le da mucho valor a la atropellada que le dio a un perro Jackie Stewart, pues ese fue el único muerto en el GP de 1970.
También hay confusiones de fechas y fotos, de años y pilotos, de historias y hay gente que jura en sus tweets que Jim Clark se mató en 1964, cunado yo lo recuerdo ganando carreras todavía en 1968. Bueno y esos son los profesionales. Aparte están los que nos informan que si el equipo Mercedes tiene un motor Mercedes, pues el McLaren tiene un propulsor McLaren y el Lotus tiene un motor Ford, lo cual seguramente le vendrá de sorpresa a Romain Grosjean y a Pastor Maldonado.
Los expertos en F1 son más que los de futbol, y eso ya es un decir de magnitudes descomunales, y pontifican o atacan a quienes no comparten su opinión basada en la irresponsabilidad del anonimato y la falta de educación (en todos aspectos) del que la emite.
La F1 llega y con ella, todos los ‘poseurs’ que mueren por demostrar que saben menos que los míticos mil millones de monos tecleando una carta en máquina eléctrica. Había un dicho muy famoso: “Más vale dejarlos pensar que soy un idiota, que abrir la boca y permitirles comprobarlo”. Eso aplica completamente para estos pseudoexpertos, que deberían bajarle a sus opiniones y documentarse más. Podrían empezar por leer un diario como EL UNIVERSAL o bajar una revista como FASTmag en PDF (gratis). Eso sería un comienzo adecuado, pero mejor eviten a esos “expertos” que el año que entra, ya habrán cambiado de giro.
scuderiargz@yahoo.com.mx
