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alejandro.rodriguezd@eluniversal.com.mx
Después de una gran actuación en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, en donde se colgó dos metales dorados para proclamarse como el mejor clavadista del continente desde el trampolín de tres metros, Rommel Pacheco busca seguir su buen paso en el Campeonato Mundial de Natación.
Desde Kazán, Rusia, el yucateco disputa hoy la prueba de sincronizado desde su fuerte de 3m, junto a Jahir Ocampo, con la idea de repetir las buenas puntuaciones logradas en Canadá y la meta de alcanzar el podio en el máximo evento de su deporte.
“La competencia en Panamericanos sirvió de preparación para el Campeonato Mundial, en donde están las potencias que no participan en la justa continental como China, Rusia, Inglaterra y demás países. Fue bueno las puntaciones que obtuvimos en Toronto para buscar repetirlas en los campeonatos Mundiales y estar peleando los primeros lugares”, apuntó Pacheco en entrevista con EL UNIVERSAL.
Rommel ya pudo palpar la fosa provisional del Kazán Arena, al haber participado en las finales de trampolín de un metro, en donde se ubicó en el lugar 11. Pese a este resultado, confía en que sus posibilidades de alcanzar presea aumentan al tirarse desde su distancia que más frutos le ha brindado en el presente ciclo olímpico.
“Me veo con muchas opciones [de subir al podio], pero sé que es complicado. Será difícil como cualquier competencia pero ahí está la posibilidad. Es cuestión de repetir lo hecho en Canadá y lo que he estado haciendo a lo largo del año. Hay que estar pegado a los 500 puntos en lo individual y a los 430 en sincronizados para pensar estar en buenos lugares”, detalló.
Rommel, en Toronto, primero se llevó la prueba individual de trampolín de tres metros, el pasado 11 de julio, para después sumar un segundo metal áureo en sincronizados junto a Ocampo. Fueron dos primeros lugares que contribuyeron para colocar a México en el primer lugar en clavados en los recién concluidos Panamericanos.
“Me sentí a gusto y tranquilo a lo largo de las competencias en Canadá. Me llevé dos de oros, pero así todo el equipo tuvo un gran desempeño, con cinco metales áureos de las ocho en disputa. Esto habla de la competencia que tenemos en el país, en donde uno debe trabajar diario para poder estar en la selección. Esta competencia interna es un buen aliciente para mantenernos con un buen nivel”, agregó.
Rommel se encuentra en un segundo aire en su carrera deportiva, en donde los resultados se le han dado. Afirma que es producto a un mayor trabajo en el aspecto físico.
“He tendido una buena preparación física en estos años. Así también en lo mental. Es el resultado de trabajo diario, mucho esfuerzo y dedicación. Además de la experiencia ganada en muchos años. Así pasa. No he tenido ninguna lesión, estoy bien y me permite trabajar al cien por ciento. Las competencias se ganan día por día. Esa es la clave, el trabajo diario”, subrayó.
Rommel busca su revancha deportiva en esta olimpiada, luego de no haberse clasificado a Londres 2012. Una meta en donde el Campeonato Mundial de Kazán puede ser su impulso final. “Hace tres años no pude ir a Londres, pero ahora estoy bien y esperemos que en Río esté y pueda pelear por una medalla”.