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hector.morales@eluniversal.com.mx
La cuenta bancaria de los Tigres tiene los fondos suficientes para dinamitar en cualquier momento el mercado de fichajes. Enner Valencia será su próxima detonación. Con el delantero ecuatoriano, la intitución felina habrá gastado 69 millones de dólares en los últimos cuatro años futbolísticos.
Ningún otro equipo en la Liga MX ha invertido tanto en fortalecer su plantel como la escuadra regia. América ha inyectado a su nómina desde 2014-15, 59 mdd, para ser la franquicia que más se le acerca a la universitaria en ese rubro.
Guadalajara (56.54 mdd), Cruz Azul (34.65 mdd) y Pumas (1.99 mdd) se quedan cortos ante los argumentos económicos que ha mostrado Tigres en torneos recientes.
La billetera del representativo de la UANL ya le sirvió para la conquista de los títulos de los Torneos Apertura 2015 y Apertura 2016. Sin embargo, dejó escapar otros dos cetros de Liga MX, un par de Liga de Campeones de la Concacaf y cayó en una final de Copa Libertadores frente a River Plate de Argentina.
La internacionalización mediante coronas le ha costado trabajo a los habitantes de El Volcán, pese a lo gigantescos que parecen sus fondos monetarios.
Si se concreta la contratación de Valencia representará el esfuerzo económico más importante de los felinos, pues los 11.4 mdd que vale, superarán los 10.1 mdd que pagaron por Jürgen Damm.
Alejandro Rodríguez, presidente del club, reveló en entrevista con EL UNIVERSAL, que no sólo se trata de poner el dinero sobre la mesa, sino que se necesita saber comprar futbolistas que rindan.
“Es un esfuerzo que es relativo, porque hemos preguntado por varios jugadores y puedo decir que en el mercado mexicano hay quienes son más caros”, dijo el inge al referirse al estelar delantero francés, André-Pierre Gignac.
Razón por la cual, cada vez que se abre la ventana de traspasos de futbolistas hay que mirar a lo que puedan traer los Tigres. No sólo se atienen a lo que ofrece el mercado nacional, sino que buscan elementos brillantes en el balompié europeo y en Sudamérica.
Atrás han quedado las épocas en las que sólo los “grandes” eran los encargados de detonar “bombas”. Hoy Tigres hacen esa labor.
