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Fue hasta la última fecha del Clausura 2017 cuando los demonios del descenso consumaron su fechoría. Después de 17 largas y sufridas jornadas, los Jaguares de Chiapas dijeron adiós al máximo circuito tras el triunfo de 1-2 del Morelia en casa del Monterrey. La victoria felina 1-0 contra el Atlas fue la más amarga de su aún joven historia.
El cuadro sureño hizo su parte con un gol de Christian Bermúdez (10’), pero no fue suficiente para mantenerse en la Liga MX.
Luego de 15 años ininterrumpidos en Primera División desde su fundación, el cuadro de Chiapas se despidió de la división de honor, tras caer en la batalla final ante Veracruz y Monarcas.
Diferentes infiernos, mismo objetivo: la salvación. Jaguares, último lugar de la tabla de cocientes encontraba esperanzas con el golazo del “Hobbit” Bermúdez que dejó mudo al estadio Jalisco.
En el BBVA Bancomer, casa de los Rayados, el Morelia, segunda presa de los demonios se encontraba en acción. El cuadro de Monarcas volvió a la vida con un gol de Gastón Lezcano al 30’ Era el minuto 70 en ambos partidos, Morelia y Jaguares cumplían su cometido: la victoria.
En la Sultana del Norte, los Rayados consiguieron el empate al 86’ por conducto de Dorlan Pabón, quien marcó de penalti.
Sin embargo, al 91’, Raúl Ruidíaz le devolvió la alegría y la permanencia al cuadro amarillo y rojo. Éxtasis en la banca de la Monarquía al tener la anotación que les permite seguir en la Liga MX. El silbatazo final llegó en el estadio Jalisco y con él, las lágrimas de los jugadores felinos. La salvación estuvo cerca. El infierno los espera.