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El Real Madrid venció por 4-1 en el campo del Celta de Vigo y se situó a un solo punto de conquistar el título de la Liga española, que el domingo vivirá su última jornada.
El conjunto blanco apeló al gran momento de Cristiano Ronaldo, autor de un doblete, para llevarse un triunfo muy trabajado. John Guidetti recortó distancias para el Celta, pero Karim Benzema aseguró la victoria visitante inmediatamente después y Toni Kroos completó la goleada.
El encuentro, aplazado en su día por problemas de seguridad en el estadio Balaídos, exigió al Madrid, pues el local expuso orgullo y profesionalismo, a pesar de no jugarse nada. Los blancos aprovecharon el poder de su pegada y la expulsión de Iago Aspas en la segunda parte, para ponerse líder de la Liga española con 90 puntos, tres más que el Barça.
El conjunto blanco necesitará al menos un empate en el campo del Málaga para decidir el título, porque la igualdad a puntos favorece a los catalanes, que recibirán al Éibar. El Real lo tiene todo a favor, pero todavía debe refrendarlo.
El conjunto dirigido por Zinedine Zidane fue de más a menos en la primera parte del encuentro. Empezó concentrado y con la tensión necesaria, refrendando su seriedad con un gol. A los 10 minutos, el balón le cayó a Cristiano y marcó con un espectacular zurdazo.
Pero el equipo blanco fue cediendo metros. No supo descifrar la presión del Celta, casi suicida, y no encontró soluciones individuales para desequilibrar. Además, el conjunto vigués fue creciendo en la medida que se fue agigantando la figura de Aspas.
El Madrid recuperó la seriedad tras el descanso y a los 48 minutos encarriló el triunfo. Isco realizó su primera aparición seria con una magnífica jugada personal que incluyó una asistencia para que Ronaldo marcara con una precisión de cirujano.
El equipo blanco tenía el partido en la mano, pero todo se enredó a los 62 minutos con una extraña decisión del árbitro Martínez Munuera, quien mostró la segunda tarjeta amarilla a Aspas por fingir supuestamente una caída dentro del área, cuando hubo contacto con Sergio Ramos. El único debate posible es si éste fue suficiente para derribarlo.
Ahí terminó la emoción del duelo. El coloso se llevó tres puntos que lo sitúan a un pequeño aliento del título. El domingo se decidirá.