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Los jugadores de la Selección Nacional lo confiesan, la Ciudad de México les jugaba en contra en los duelos de eliminatoria, sobretodo a los “europeos”, acostumbrados a desempeñarse a nivel de mar, o un poco más arriba.
“La verdad es que sí, la altura pesa bastante para los que venimos de otro país”, confesó Jonathan dos Santos, quien milita en el Villarreal, provincia de Valencia, que está a 42 metros sobre el nivel del mar.
El volante justificó: “Venimos de otro país y en el primer entrenamiento que hay, siempre me cuesta respirar, me ahogo, pero lo importante es que los doctores, el entrenador y los preparadores físicos lo llevan bastante bien y hacen que no se sienta tanto, esto ayuda mucho”.
En tanto que Raúl Jiménez, que viene de Lisboa (2 msnm) le restó importancia. “El cuerpo técnico analizó las cosas y si ellos creen que es lo más conveniente para nosotros, lo aceptamos. Todo lo que sume para ganar el viernes, está bien”. Édgar Luna Cruz
