Wayne Rooney se convirtió en el máximo goleador histórico de Manchester United, al alcanzar las 250 dianas con un tiro libre en los tiempos de reposición que rescató un empate 1-1 ante Stoke el sábado por la Liga Premier.
Rooney estaba empatado con 249 goles con Bobby Charlton, quien tenía el récord desde 1973.
El delantero de 31 años juega en su 13ra temporada con United, y ya no tiene la titularidad asegurada como en sus días de gloria. En esta ocasión, salió de la banca para conseguir el empate con un magistral tiro libre, en uno de los últimos momentos memorables de su ilustre carrera.
Rooney llegó a ser considerado como uno de los mejores futbolistas del mundo, al nivel de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, cuando tuvo su mejor temporada con United en 2009-10. Pero su carrera se estancó, mientras que las estrellas del Barcelona y Real Madrid siguieron escalando a niveles pocas veces vistos.
Para algunos seguidores de United, Rooney manchó su legado al tratar de irse del club en 2010 y después al final de la campaña de 2012-13.
De todas formas, Rooney ha tenido muchos momentos icónicos con la camiseta roja desde que llegó procedente de Everton por 20 millones de libras en 2004 como un prodigio de 18 años. Todo comenzó con su debut, cuando logró un triplete ante Fenerbahce en un partido por la Liga de Campeones en Old Trafford.
Rooney anotó 17 goles en su primera temporada, incluyendo una famosa volea desde 30 metros contra Newcastle en abril de 2005 que será recordado como uno de los mejores goles de su carrera.
Su temporada con más goles fue 2009-10, cuando anotó 33 veces en todas las competencias (26 en la liga) y fue elegido como el mejor jugador de la liga Premier.