Futbol

Las manías de Paco Jémez

Una de las nuevas reglas que ha establecido el técnico español es sobre el horario de las prácticas

Imago7
12/01/2017 |00:15Redacción |
Redacción El Universal
Pendiente este autorVer perfil

Faltaba más. En Cruz Azul se hacen las cosas como quiere Paco Jémez. Los jugadores entrenan a la hora que el señor quiere. El problema es que esa hora varía mucho, dependiendo del partido en puerta. El español vino a imponer sus costumbres a Cruz Azul y los jugadores han obedecido sin quejarse... Todavía. Era una costumbre que los entrenamientos en La Noria iniciaran a las nueve de la mañana, pero ya no. Jémez tiene la manía de trabajar semana a semana, según la hora en que se juega el partido. Para esta jornada las prácticas iniciarán a las 12 del día, mismo horario del juego que se celebrará el domingo contra los Pumas. Y si el siguiente de visita es a las nueve de la noche, se entrenará cerca de esa hora para que el equipo se acople. Así lo ordena Jémez.

“Canelo” vs Chávez: ¿Quién teme?

Tremendo round previo se dieron Saúl “Canelo” Álvarez y Julio César Chávez Junior en las redes sociales. Ambos boxeadores mexicanos se lanzaron acusaciones sobre quién es el que no quiere realizar la pelea entre ellos. El “Hijo de la Leyenda” acusó a Golden Boy Promotions, promotora del “Canelo”, de que no les han mandado el contrato. A esa acusación, el tapatío respondió que eso era mentira y que ya mandaron el contrato al manejador del sinaloense, que es Al Haymon. También Oscar de la Hoya, promotor de Álvarez, se subió al intercambio de golpes mediáticos y pidió a Chávez que “no mienta”, pues asegura que ya mandaron el contrato sólo para que “Julito” lo firme y se encuentren sobre el enlonado el 6 de mayo. ¿Quién es el que tiene miedo?

Newsletter
Recibe en tu correo las noticias más destacadas para viajar, trabajar y vivir en EU

Magia negra en Arena CDMX

Durante el entrenamiento de los Suns de Phoenix realizado en la Arena Ciudad de México, a Lindsey Smith, reportera de la franquicia, se le “extravió” la cámara de video con la que graba sus especiales para la página web del equipo. Cuando los medios de comunicación se dirigían a la salida, prácticamente les pasaron “báscula”, o sea los revisaron para ver si no había alguien de “20 uñas” por ahí... Al final, la cámara nunca apareció entre los reporteros y camarógrafos mexicanos, dejando en el aire la sospecha de si alguien la “tomó prestada” sin avisar, la reportera olvidó dónde la puso o, simplemente, por arte de magia, cambió de lugar. Ya sabemos lo que significa eso en nuestro México.