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edgar.luna@eluniversal.com.mx
La percepción general, tanto en México como en Estados Unidos, es que la selección que dirige el alemán Jürgen Klinsmann no vive su mejor momento.
Los argumentos son que el equipo se encuentra en transición, que a Klinsmann se le ha terminado el discurso, que la mayoría del grupo ya no lo quiere y que por hombre por hombre, México es mejor que los estadounidenses.
Pero Mike Sorber piensa de otra manera. El ex auxiliar de la selección de Estados Unidos, ex jugador de los Pumas de la Universidad y ahora auxiliar en el Phildelphia Union de la MLS, siente que aunque el equipo de las barras y las estrellas no está en su clímax, tiene lo necesario para vencer al Tri.
Tienen nada menos que a Christian Pulisic, volante del Borussia Dortmund de Alemania.
“Hoy, Estados Unidos recarga su juego en Pulisic, es el nuevo Landon Donovan. Tiene futbol, tiene chispa, tiene gol; hoy él es el espíritu del equipo. Él será la diferencia para el juego”, comenta.
Además de Pulisic, Sorber no puede dejar atrás a gente probada como “Jozy Altidore, Michael Bradley. Quien piense que venimos con un equipo B, está equivocado, tenemos argumentos para derrotar a México, como siempre lo hacemos aquí, en Columbus”.
Y en efecto, Columbus. Para el ex volante de los Pumas, cuenta mucho. “Simplemente nombrar Columbus ya pone nerviosos a los mexicanos. No sé si sea el frío, que su gente no va a llenar al estadio, o que les hemos ganado siempre, pero cuando llegan aquí, siempre les pase algo, no funcionan igual”, asegura de manera tajante.
La cancha del MAPFRE Stadium “está perfecta, es una mesa de billar. La gente no será agresiva, sólo apoyará a nuestro equipo, así que los mexicanos no tendrán pretextos de algún tipo, vamos a ganar bien, no lo veo de otra forma”.
La confianza extrema de los estadounidenses parece que les hace olvidar la reciente derrota que sufrieron a manos del equipo mexicano, en el duelo donde estaba en juego el pase a la Copa Confederaciones de Rusia 2017, cuando el Tricolor venció en el Rose Bowl 3-2.
“Ese juego fue anecdótico. Ahí, la diferencia fue el ‘Tuca’ [Ricardo] Ferretti, pero ahora él no está. Los detalles juegan a nuestro favor. Ni lo vemos como revancha, ya pasó, ya perdimos, pero ahora vamos a ganar”.
Sorber no cree que Klinsmann esté preocupado de más por las individualidades del equipo mexicano dirigido por Juan Carlos Osorio, ni Javier Hernández, ni Giovani dos Santos o Carlos Vela, pueden más “que todo un grupo, y así juega Estados Unidos, como un equipo. Hay que ponerle atención, mucha atención a ese tipo de jugadores, pero nosotros somos inteligentes y repito, tenemos a Pulisic que nos da un plus, él puede cambiar la historia”.
Y definitivamente, lo más importante, menciona el ex futbolista, “es que el equipo de Estados Unidos sabe que todos piensan que no están en su mejor momento y para ellos está bien, eso les pica el orgullo. Si nadie les da posibilidades de ganar, mejor, pero los goles van a caer de nuestro lado y vamos a ganar... de eso estoy seguro”.
Y para que no quede duda, hasta da el marcador: “No hay otro… 2-0”.
