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daniel.blumrosen@eluniversal.com.mx
Ammán, Jordania.— Su encanecida cabellera resalta entre el puñado de aficionados mexicanos que viajaron más de 17 mil kilómetros para apoyar a las chicas que pretenden hacer historia en el Mundial Sub-17. Es una especie de líder en el grupo, referencia obligada de todos.
Hace varios meses que Leonardo Cuéllar dejó de ser el máximo responsable de las Selecciones Femeniles Mexicanas, pero su corazón aún se exprime al observar a alguna chica tricolor detrás del balón, sobre todo si es entrenada por ese director técnico al que conoce como nadie.
Cuéllar no sólo viene a apoyar a esas niñas que —en casi todos los casos— él mismo detectó. Desea presenciar el éxito de su hijo Christopher, quien continúa su legado en los combinados de mujeres.
“La sangre llama y es obvio que estoy muy feliz por su labor”, atina a decir Cuéllar, en charla con EL UNIVERSAL. “Es una experiencia muy interesante estar apoyando desde la tribuna, con un sentimiento especial, y también la oportunidad de ver más futbol, conocer lugares tan interesantes alrededor del mundo, así es que —la verdad— estoy pasándola muy bien”.
Sentimiento que se remasteriza por el desempeño del Tricolor que dirige su hijo. Ahí, junto a los familiares de las 21 chicas elegidas por Christopher, Leonardo sufre y goza como uno más, aunque también se da tiempo para tratar de dimensionar los pasos dados por la persona a quien confió sus más sagrados secretos como timonel.
“Él tiene muy definidos sus conceptos, ideas, y las ha sabido inculcar a este grupo de niñas mexicanas”, valora. “Obviamente, está buscando hacer su propia historia, y ha sido paciente, disciplinado”.
Para muestra, lo hecho por un grupo que comienza a atrapar reflectores en México. Como suele suceder con las Selecciones Femeniles, la actual Sub-17 no estaba en el radar de varios aficionados, pero ha mutado en el principal blanco después de su histórica primera fase.
Leo tuvo mucho que ver en la formación de estas chicas, por lo que le genera satisfacción observar lo que han logrado. “Es una generación que ha trabajado muy fuerte, con mucho compromiso. Se lo merecen”, afirma.
Adelanta que el duelo de cuartos de final, contra Venezuela, será complicado, pero no imposible de ganar. Su bagaje le permite diagnosticar que el Tricolor cuenta con muy buenas posibilidades de alcanzar las semifinales por primera vez en esta categoría.
“Venezuela ha crecido”, desmenuza. “En su primer juego, enfrentó a Alemania. Contra Canadá manejó muy bien la situación de la jugadora menos. y es digno merecedor [de la clasificación a cuartos]. Va a ser un partido muy difícil, pero creo que el equipo mexicano está listo para competir en cualquier circunstancia. La humildad y unión que tiene le da posibilidades [de avanzar]”.
Para prolongar los éxitos que le tienen tan orgulloso.
