Desde hace más de tres semanas, Rubén Omar Romano está hospedado en un hotel de la Ciudad de México, a la espera de noticias para volver a la actividad como director técnico. El entrenador vino para dar una plática a jóvenes por parte de la Liga MX, pero nos cuentan que la directiva del Cruz Azul le pidió aguantar ante el posible cese de Tomás Boy. Poco tiempo después, la del América también se enteró y le pidió lo mismo, por los malos resultados de Ignacio Ambriz. Al final, los dos equipos siguen con sus entrenadores y Romano sólo a la espera, impaciente, para que finalmente llegue la esperada noticia y pueda regresar a las canchas, como todo lo indica, con uno de los llamados grandes del futbol mexicano. Las posibilidades están ahí. Sólo hay que tener paciencia, Rubén.
Contra Castillo, 100 mil firmas
Aunque el titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Alfredo Castillo, fue ratificado hace algunas semanas en el cargo, al parecer no mucha gente está contenta con su desempeño. Al menos en la página change. org ya suman hasta el momento casi 100 mil firmas para que el dirigente deje su puesto.
La petición, promovida por el diputado federal Jorge Álvarez Máynez y que comenzó a recabar rúbricas en agosto de este año, tenía hasta ayer por la noche 91 mil 400 firmas.
La intención es entregar el documento los próximos días al Presidente de México.
Castillo, quien suma poco más de un año al frente de la Conade, se encuentra actualmente con la delegación nacional que participa en los Juegos Paralímpicos en Río de Janeiro.
Continúa la crisis en Jaguares
En Jaguares quedaron las cosas muy calientitas. El que se haya quedado José Cardozo dejó tranquilos a los jugadores, pero sólo a medias, ya que la presencia de Adalberto Palma, director deportivo, no es bien vista en la selva.
La cuestión es que el ex atlantista se ha destacado por hacer contrataciones sin ton ni son, tapando la salida de jugadores mexicanos que estaban en la mira de Ricardo La Volpe, anterior técnico, como futbolistas en crecimiento. La última fue la de traer a dos porteros del extranjero que ni siquiera han debutado, además de refuerzos tardíos que no se han podido adaptar a la ciudad chiapaneca. La calma no llega a Chiapas.