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Para sacar su cabeza del asfixiante espacio formado por esas dos medias lunas de madera, es muy probable que cada uno no tenga de otra más que ingeniárselas y hacer caer la filosa cuchilla que pende sobre el que está a su lado. Partido de genuina sobrevivencia disfrazado de Clásico Joven.
El Cruz Azul y el América chocan esta tarde con la eterna necesidad de salvar el orgullo de sus respectivos pueblos, aunque ahora podría existir algo más importante: garantizar la permanencia de su cuestionado director técnico.
Tomás Boy e Ignacio Ambriz acapararán reflectores debido a la presión que les envuelve. Es cierto, el presente numérico de las Águilas es bastante menos apremiante que el de los Cementeros, pero la herida provocada por el Guadalajara hace dos semanas podría ser mortal si La Máquina les aplica una dosis bastante similar.
A punto de cumplir la primera mitad del Apertura 2016, ninguno ha convencido a sus respectivas aficiones, más allá de que están metidos en la lucha por la clasificación a la Liguilla.
Junto con los Xoloitzcuintles de Tijuana, el Morelia y el Atlas, el Cruz Azul es el segundo club con menos derrotas en el presente certamen (una). El problema es que sólo ganó uno de los siete encuentros que disputó (3-1 al Santos Laguna).
Las cinco igualadas que acumula le impiden estar dentro de la zona de “Fiesta Grande” y ya tiene el quinto peor arranque de la institución en la historia de los torneos a una vuelta (41 ediciones).
Apenas tiene ocho unidades, mismas que logró —tras 630 minutos jugados— en el Bicentenario 2010, aunque en esa ocasión su foja era de dos victorias, par de empates y tres caídas. No tenía tan pocos triunfos a esta altura del torneo desde hace 12 años (Apertura 2004). Esa vez tuvo su comienzo más pobre: un éxito, una igualada y cinco reveses (cuatro puntos ganados de 21 posibles).
El Clausura 2003 fue el único certamen en el que no ganó alguno de sus siete juegos iniciales (cinco empates y dos derrotas). La Máquina se impuso hasta la décima jornada, contra los Pumas (2-0).
Los inicios del Clausura 2004 (1-2-4) y el Apertura 2015 (2-0-5) fueron peores que el actual, pero la racha de cuatro ausencias consecutivas en la fase final (la más prolongada en la historia del equipo) aumenta la tensión.
Esa que también sufre Ambriz, sin importar que el América ha estado en puestos de Liguilla durante las siete jornadas que se han efectuado hasta el momento.
Dirigir al club durante el semestre en el que celebrará su centenario aumentó considerablemente el nivel de exigencia. Se trata de un certamen en el que debían ganarse todos los cotejos importantes y coronarse. Ya falló en el primero, al ser goleado por las Chivas en el Estadio Azteca (0-3), sobre cuya cancha suma tres partidos de Liga sin victoria (una igualada y dos descalabros).
La poca confianza que buena parte del pueblo azulcrema le tiene, sin importar la consecución de la Liga de Campeones de la Concacaf 2015-16, se esfumó con el estrepitoso revés en el Clásico de Clásicos.
Hoy se enfrentará al Cruz Azul, como entrenador, por decimocuarta vez. Su balance es de tres victorias, tres empates y siete derrotas, a diferencia del “Jefe”, quien presenta buenos números contra el América: 13 victorias, cuatro igualadas y nueve caídas.
Sí, es duelo de sobrevivencia.
