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Cary, Estados Unidos.— Aquellas lágrimas derramadas sobre el campo del StubHub Center reflejaban mucho más que la alegría por el gol y la consecución de la Supercopa: eran el adiós a uno de esos amores que nunca se olvidan.
Todo parece indicar que, ahora sí, la histórica odisea de Omar Bravo como futbolista del Guadalajara ha llegado a su fin. El máximo anotador en la historia del Guadalajara (132 goles entre Liga y Liguilla; 160 totales) debutó anoche con su nuevo club: los RailHawks de Carolina, quienes jugaron un partido amistoso frente al West Ham de Inglaterra (2-2). Ingresó al minuto 80. Tuvo poco tiempo para mostrarse. Su nuevo equipo pertenece a la North American Soccer League (NASL), segundo circuito más importante en el futbol de Estados Unidos.
Desde hace varias semanas se adelantó que el sinaloense no entraba en los planes de la directiva de las Chivas, pese a que le restaban dos años y medio de contrato. Le buscaron equipo en el Régimen de Transferencias, donde no se arregló con alguno, pese al interés mostrado por el Necaxa y el Toluca.
Lucía como una involuntaria extensión al vínculo de Omar con el Rebaño Sagrado... Hasta que llegó la oferta que le sedujo.
Es por eso que se despidió de los rojiblancos en Los Ángeles, previo a que regresaran a Guadalajara. Fin a su tercera etapa en el club con el que debutó hace más de tres lustros. Resulta bastante probable que haya sido la última.
Se trasladó a la que ya es su casa. Anoche debutó en el WakeMed Soccer Park, donde recibió muchos aplausos del ilusionado público.
Previo a que los altos mandos rojiblancos lo hicieran oficial, Curt Johnson, presidente y gerente general del conjunto estadounidense, publicó en su cuenta de Twitter (@curtjohnson17) una foto del mochiteco con la Supercopa ganada el domingo. Terminaron las dudas. Usa el “99” en la espalda.
Es la segunda experiencia del atacante en el balompié de Estados Unidos. Militó con el Sporting Kansas City, de la Major League Soccer (MLS), durante la temporada 2011. Jugó 30 partidos y marcó nueve tantos.
Los RailHawks son el séptimo club en su carrera. Además de las Chivas y el Kansas City, militó con el Deportivo La Coruña, los Tigres, el Cruz Azul y el Atlas, aunque siempre ha dejado claro que su corazón es rojiblanco. Por eso, derramó lágrimas en su adiós.
