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edgar.luna@eluniversal.com.mx
El historial de México en la Copa América ha sido rico y provechoso. Si no, hay que sacar cuentas: de las nueve participaciones que tiene México en la hoy justa continental, hay en su haber dos subcampeonatos, tres terceros lugares, y uno que otro tropezón…
Pero qué tropezones.
Todo iba bien hasta que la Concacaf metió mano y exigió, que no es lo mismo que pedir, a la Federación Mexicana de Futbol que se decidiera sin salirse de su confort, o sea que le diera prioridad a su torneo, la Copa de Oro, pero sin abandonar a la Conmebol.
Ahí vinieron los errores, México al llevar a una selección alterna quedó en los últimos lugares del evento, mala imagen de cara a la Copa América del Centenario.
“No, eso no es así, al Tri se le respeta”, replicó el mediocampista Andrés Guardado, uno de los líderes del equipo nacional.
Para el volante zurdo, a pesar de que el Tricolor arrastró el prestigio en las dos últimas ediciones: Argentina 2011 y Chile 2015, “todavía nos ven con respeto, somos un rival a vencer”, abogó.
No es cuestión de que le crean al capitán del PSV Einhoven, “hay que peguntárselo a los equipos, al mismo Chile contra el que jugamos [el pasado] miércoles. Seguro que Argentina o Brasil no hubieran estado muy a gusto de tenernos como rivales”, destacó muy seguro.
Aunque se dice que en el futbol no hay memoria, la realidad es que las potencias de Sudamérica tienen presente lo que ha hecho la Selección Mexicana en estos 23 años de relación amor-odio.
“Los equipos de la Conmebol tienen buenas opiniones de nosotros”, añadió desafiante. “Somos una Selección a la cual se le respeta”, y para que quede claro, “lo vamos a reflejar en la cancha”.
Grandes triunfos. La Selección ha dado las sorpresas en diferentes ocasiones en el torneo continental como en 2001, cuando con gol de Borgetti venció 0-1 a Brasil. En 2004 volvió a dar el campanazo ahora pasando sobre Argentina por el mismo marcador y en 2007 le repitió el golpe a los amazónicos por 2-0. Esas victorias y las actuaciones globales, han hecho que el equipo que dirige el colombiano Osorio, se haya ganado su prestigio, que no ha perdido a pesar de las dos últimas Copas.
A unas horas de que el balón gire en el grupo de México, Guardado siente que el grupo llega en muy buen momento.
“Trabajar sobre una victoria es lo mejor que nos puede pasar, ayuda al ánimo del equipo, se corrigen los errores con buen estado de ánimo. Somos conscientes de que Chile fue muy superior a nosotros, sobre todo el primer tiempo, pero terminas ganando, eso quiere decir que el equipo sabe ganar, aunque no se la pase bien en el partido”.
Andrés, con una carrera bien cimentada en Selección Nacional, reveló que el medio tiempo, el descanso, se ha vuelto punto medular en el equipo mexicano en la era de Juan Carlos Osorio, “pues ahí se corrigen los juegos”.
El profe, explica, “dio instrucciones y escuchó lo que teníamos que decir. Los que estábamos fuera de la cancha vemos el futbol de otra forma en ese momento y tratamos de ayudar, por eso esto se llama selección, es un trabajo de todos”.