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Un gol de visitante de Antoine Griezmann y las milagrosas atajadas de Jan Oblak fueron suficientes para clasificar ayer al Atlético de Madrid a la final de la Liga de Campeones.
El equipo de Diego Simeone cayó 2-1 en su visita a Bayern Munich, pero hizo valer el gol de Griezmann y la victoria 1-0 en la capital española para conseguir su lugar en el gran cotejo del 28 de mayo en Milán. El global terminó 2-2. Oblak tuvo varias intervenciones de película, entre ellas el penalti que atajó a Thomas Müller.
“Estamos en la final. Hay que estar orgullosos y felices. Bayern tiene unos jugadores asombrosos adelante y era imposible no recibir goles”, comentó Oblak.
Atlético disputará su segunda final de Champions en los tres últimos años, y podría reeditar la de 2014, que perdió ante Real Madrid si su vecino elimina hoy al Manchester City en el Santiago Bernabéu. Esa serie está 0-0.
Griezmann quiere concentrarse por ahora en otra puja. En la Liga española, el Atleti marcha debajo del Barcelona. “Tenemos que tener los pies en el suelo”, recomendó. “Y centrarnos en la Liga. Ya tendremos tiempo para pensar en la final”, añadió el francés.
En el inicio del segundo tiempo (53’), Griezmann completó una pared con Torres para decretar el momentáneo 1-1. Antes, Xabi Alonso (31’) igualó el global en un tiro libre. Poco después, Müller desperdició un penalti clave que pudo liquidar al Atleti. “La eliminación de éste es distinta a la del año pasado o a la de hace dos años, porque duele mucho más”, lamentó el goleador alemán.
Robert Lewandowski devolvió la ventaja al Bayern (74’), pero el gol de visitante que aportó Griezmann estableció la diferencia.
En la agonía, Fernando Torres tuvo oportunidad de restarle drama al final, pero su tiro penalti fue atajado por Manuel Neuer.
Los dirigidos por Josep Guardiola no dejaron de luchar, pero Oblak se lució. “Nuestro equipo jugó de manera brillante”, destacó el presidente del conjunto bávaro Karl Heinz Rummenigge. “Merecían llegar a Milán”.
Bayern quedó eliminado en la instancia de semifinales por tercera campaña consecutiva ante un equipo español. En su campaña de despedida antes de emigrar al Man City, Guardiola no pudo conquistar el triplete de títulos.
¿Misión inconclusa?
“Tal vez...”, respondió Pep. “Me imagino que seré juzgado por no haber ganado la Champions. Hice mi mejor esfuerzo y no tengo remordimientos”.
