El primer gran homenaje de la hinchada del Barcelona a Johan Cruyff se producirá hoy en el Camp Nou ante el Real Madrid, en un Clásico mucho más simbólico que determinante para el devenir de la Liga española de futbol.
El genio holandés, “padre” del futbol que practica ahora el Barcelona, murió el jueves 24 de marzo de cáncer de pulmón y será el gran ausente de un partido que mide a los dos grandes equipos españoles en situaciones muy dispares.
Líderes de la Liga con 10 puntos de ventaja sobre el Real Madrid, los azulgrana aspiran a rendir tributo al hombre que les legó el estilo de juego que aún hoy los distingue con una victoria que confirme su supremacía frente al eterno rival.
Tras encadenar 39 partidos sin conocer la derrota en todas las competiciones, los dirigidos por Luis Enrique podrían dejar la Liga casi sentenciada con un triunfo frente a un Real Madrid más necesitado que nunca de un buen resultado.
Sin opciones en la competición doméstica, nada mejor para los blancos que una buena actuación ante el tricampeón azulgrana para reforzar su moral y la de su hinchada, de cara al próximo duelo de cuartos de final de Liga de Campeones frente al Wolfsburgo alemán.
Conquistar la que sería su undécima Copa de Europa es la única motivación de un Real Madrid que cayó por un humillante 4-0 en el partido de la primera vuelta frente a los azulgrana en el estadio Santiago Bernabéu.
Entonces, el español Rafael Benítez se sentaba al frente del banco que ahora ocupa Zinedine Zidane. El francés, que protagonizó varios clásicos como futbolista, afronta ahora, sin ánimo de revancha, con ilusión y optimismo, el primero como entrenador.
“No será un examen para nosotros, porque estamos en una buena dinámica. Será un partido diferente porque [los clásicos] siempre lo son, pero la gente quiere ver un buen partido de futbol y yo quiero ver a mi equipo como está últimamente”, afirmó este viernes Zidane, convencido de que “no será fácil” ganar a su equipo.
Los blancos encadenaron cuatro victorias en la Liga y mejoraron la pobre imagen que habían ofrecido en su caída ante el Atlético de Madrid, que también hoy se medirá al Betis, en duelo por la trigésimo primera fecha, con la esperanza de recortar distancias respecto del Barcelona.
Los rojiblancos, que dejaron fuera de combate a sus vecinos blancos a finales de febrero, aguardan un tropiezo azulgrana para reducir sus nueve puntos de desventaja y un triunfo propio que los mantenga en la segunda posición.
“Si lo hacemos bien, será bueno, pase lo que pase en el Clásico”, afirmó Diego Simeone, el técnico del Atlético. “Es el campeonato de la regularidad. Estamos a falta de poco y con la posibilidad de acercarnos al Barça si lo hacemos bien”, añadió.
Una victoria del Barcelona ante el Real Madrid dejaría prácticamente decidida la Liga, apenas tres días antes de que el conjunto de Luis Enrique y el de Simeone se enfrenten en los cuartos de final de la Champions.
Para el Clásico, Luis Enrique no podrá contar con el francés Jéremy Mathieu, operado el jueves del menisco, pero sí con su tridente ofensivo, el más goleador de Europa.
El argentino Lionel Messi, el uruguayo Luis Suárez y el brasileño Neymar regresaron de los compromisos con sus selecciones decididos a seguir imponiéndose sobre la ‘BBC’ del Real Madrid. Entre los tres, suman 20 goles en sus enfrentamientos de Liga ante el archirrival.
El galés Gareth Bale, el francés Karim Benzema y el portugués Cristiano Ronaldo no lograron imponerse al Barcelona en ninguno de los tres Clásicos anteriores que disputaron juntos.
“Mañana [hoy] es un partido para cambiar eso y lo vamos a intentar”, aseguró Zidane, con una sonrisa, pese a que no podrá contar en la zaga con su compatriota Raphael Varane por unas molestias que, como el azulgrana Mathieu, sufrió en la concentración con Francia.
El entrenador galo, no obstante, parece tener muy claro el 11 que alineará ante los azulgrana para intentar cambiar la negra estadística blanca en los Clásicos de Liga desde que Messi marcó su primer “hat-trick” ante el Real Madrid hace ya nueve años: 10 victorias azulgrana, cuatro triunfos madrileños y dos empates.
Las dudas son también escasas para Luis Enrique, convencido como está de que su equipo agradecerá el legado de Cruyff, no sólo con una leyenda en la camiseta, sino con goles y el futbol espectáculo que el mito holandés les transfirió.
El resto de la jornada de sábado se completará con Las Palmas-Valencia, que verá el estreno de Pako Ayestarán al frente del banco valencianista después de la destitución del británico Gary Neville, y con el clásico gallego Celta-Deportivo.
