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Aquel polémico festejo, tras la electrizante igualada en el Clásico Joven, podría salirle a Tomás Boy mucho más caro que dos partidos de suspensión.
Los jugadores del Cruz Azul reconocen que extrañarán a su pasional director técnico, castigado para los vitales cotejos contra el Monterrey y los Pumas, porque siempre halla cómo motivarlos.
“Tener a Tomás afuera [del terreno de juego]... Obviamente, te mete presión para que corras, metas, pero la obligación es nuestra dentro de la cancha y [hay que] saber que tenemos que ganar con nuestra gente”, asegura Christian Giménez, quien está en contra de la sanción al ‘Jefe’.
“Deben dejar que se festeje como sea”, considera, resignado. “En su momento, me tocó jugar en contra de Tomás, pero es parte de. No hay que hacer tanto dramatismo”.
