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Aquella vuelta olímpica sobre el césped del estadio León y el recuerdo de nueve puntos ganados durante sus primeros tres juegos de Liga al frente del Guadalajara, racha coronada con el triunfo en el Clásico de clásicos (2-1), ofrecen a Matías Almeyda cierto aire en uno de los banquillos más calientes del futbol mexicano. El problema es que sus números recientes podrían acercarle a la cornisa, según el ‘modus operandi’ de Jorge Vergara.
El propietario de las Chivas, y algunos de los directivos que le han ayudado a tomar decisiones durante poco más de 13 años, no se han caracterizado por ser pacientes. Las malas rachas del conjunto tapatío suelen costar el puesto al entrenador en turno... Y la magia del ‘Pelado’ ha perdido intensidad.
Tras vencer al Querétaro, el América y el Monterrey, el Rebaño Sagrado sólo ganó uno de sus siguientes ocho encuentros de Liga (cuatro empates y tres derrotas). Ha cosechado siete de las más recientes 24 unidades que disputó, para una efectividad de 29.1%, idéntica a la obtenida por José Manuel de la Torre durante la misma cantidad de partidos en el Apertura 2015.
La única diferencia es que el ex timonel de la Selección Mexicana ganó dos partidos, igualó uno y fue superado en cinco.
Pero los altos mandos rojiblancos han cortado procesos con rendimientos mayores. En el Apertura 2009, Raúl Arias fue cesado con una efectividad de 47.6% (tres victorias, un empate y tres derrotas). El problema fue, además de ese estilo que pondera no recibir tantos, que todas las caídas fueron consecutivas.
La primera etapa del ‘Chepo’ finalizó en el Apertura 2007. El Guadalajara sumaba tres éxitos, tres empates y tres reveses, para un rendimiento de 44.4%. Caer con el DC United (1-2), en la ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana, propició el adiós.
Hans Westerhof, en su segunda era como estratega del club, fue despedido después de sumar tres triunfos, cuatro igualadas y tres caídas, en las primeras 10 jornadas del Clausura 2006 (43.3% de rendimiento).
Ignacio Ambriz, hoy en el América, tuvo foja de cuatro victorias, tres empates y cinco derrotas en los 12 juegos que estuvo al frente de las Chivas durante el Clausura 2012 (41.6% de efectividad). No le fueron perdonadas tres caídas seguidas, además de ser goleado por el Deportivo Quito (0-5) en la Libertadores.
Otros ocho directores técnicos con peores rachas que Almeyda fueron invitados a tomar sus cosas en la era Vergara.
La vocación ofensiva impregnada en el equipo y la consecución de la más reciente Copa MX podrían ayudarle a sortear el temporal, aunque no está confiado.
“Estar tranquilo [por el mal momento de los Dorados de Sinaloa], sería un grave error”, confesó el sábado, tras empatar con el Cruz Azul (1-1). “Tenemos que seguir trabajando y tratar de mejorar errores, acentuar las virtudes”.
Porque el crédito ganado comienza a agotársele.