Stuttgart.— El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, reclamó ayer a la FIFA que lleve a cabo profundas reformas para acabar con el escándalo que involucra a varios directivos del futbol internacional acusados de corrupción. “Ya dije hace unas semanas que suficiente no era suficiente. Con lo de ahora se ve cómo de nuevo el asunto va aún más allá con los nuevos acusados y las nuevas detenciones”, comentó el dirigente alemán en Stuttgart.
El jueves, el paraguayo Juan Ángel Napout y el hondureño Alfredo Hawit, ambos vicepresidentes de FIFA, fueron detenidos en Suiza por sospechas de corrupción. Los nuevos acusados se unen a los 14 altos dirigentes y empresarios ligados al futbol internacional que ya fueron imputados en mayo por la fiscalía de Estados Unidos.
Bach reclamó a la FIFA “un diálogo abierto” con las autoridades responsables de la investigación.
En ese rumbo, la FIFA deberá asegurar que en la elección del nuevo dirigente en febrero los candidatos pasan los test de credibilidad e integridad”. Asimismo, el dirigente alemán apeló a la FIFA a que lleve reformas profundas. No se debe creer que con “la elección de un nuevo presidente se solucionarán todos los problemas”.
La FIFA debe mostrar mucho más y dejar claro que “detrás de las reformas se esconde también un verdadero deseo de reforma y que estas serán puestas en funcionamiento”, dijo Bach, quien se mostró convencido de que en la FIFA existe el deseo de emprender este camino.
Arresto domiciliario. Con el arresto domiciliario contra el ecuatoriano Luis Chiriboga y la detención del peruano Manuel Burga sigue en aumento el escándalo de corrupción de la FIFA, que ha salpicado a dirigentes de la Conmebol y la Concacaf, y a sus presidentes Juan Ángel Napout y Alfredo Hawit.
Entre los nuevos acusados figuran el presidente de la Confederación Brasileña (CBF), Marco Polo del Nero, quien renunció a su cargo como miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA el 26 de noviembre y su antecesor, Ricardo Teixeira.
La investigación también incluye a los argentinos Eduardo Deluca y José Luis Meiszner, ambos ex secretarios generales de la Conmebol.
Chiriboga, presidente de la Federación Ecuatoriana, se presentó ante la justicia de su país el viernes y ayer se le ordenó arresto domiciliario. La Fiscalía de Ecuador también informó del arresto domiciliario para el secretario de la Federación, Francisco Acosta. El mismo ente anunció que para Vinicio Luna, coordinador de logística de la FEF, se dictó prisión preventiva por lavado de activos.
Burga, ex presidente de la Federación Peruana, fue arrestado el viernes por la policía cuando salía de su casa en Lima, tras recibir una orden de captura internacional procedente de Estados Unidos.
Brayan Jiménez, prófugo. En Guatemala, el presidente de la Federación Nacional de Futbol de ese país, Brayan Jiménez, es considerado prófugo, después que un juez emitiera el viernes una orden para su detención por exigencia de la justicia estadounidense, que también pide su extradición.
El Ministerio Público (MP) informó que cumplió este sábado dos allanamientos en casas del dirigente deportivo guatemalteco, en distintos puntos de la capital, pero resultaron infructuosos.