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hector.morales@eluniversal.com.mx
Leverkusen.— En cuanto se pronuncia la palabra ‘Chicharito’ en el Bayarena, el idilio comienza. Los aficionados aplauden, cantan y saltan; los dirigentes sacan el pecho orgullosos y los jugadores muestran una sonrisa. Javier Hernández conquistó al Bayer. Goles y carisma, sus armas para comenzar ese romance.
“Ha encajado muy bien en el equipo. Teníamos que realizar una contratación para reemplazar al coreano Son Heung-Min que lo vendimos al Tottenham por 30 millones de euros”, resalta el presidente del Bayer, Michael Schade.
“Tenía tres o cuatro años que queríamos traerlo, pero sabíamos que no dejaría al Manchester United o al Real Madrid, porque todos quieren jugar ahí. Se dio el fichaje y estamos muy contentos por tenerlo en nuestras filas. Su aporte ha sido importante, pese a que el equipo en general no nos tiene muy contentos”, alaba.
En Leverkusen se sabía que Hernández es un delantero que genera opiniones divididas. Sus críticos lo ‘devoran’ cuando falla las ocasiones de gol que parecerían de rutina; los ‘Chichafans’ dejan claro que el artillero mexicano es capaz de meter goles con la cara, muslos y la nuca, y siempre está de frente al gol cuando tiene regularidad.
“Conocemos la trayectoria de Javier. Obviamente nosotros nos fijamos siempre en el aspecto positivo para contratarlo. Dicen que falla ocasiones y los juicios eran severos, pero vimos que es un jugador capaz de hacer muchísimos goles ante todos los equipos en la competencia que juegue”, revela Jonas Boldt, gerente deportivo del Bayer y artífice del fichaje del seleccionado mexicano.
‘Chicharito’ tiene un registro de 12 goles en 17 partidos, además de una asistencia. Marca cada 104 minutos y es un delantero disciplinado que apenas ha visto una tarjeta amarilla.
“Es un delantero ágil, siempre ha sido rápido y tiene olfato de goleador. Pudo haber ido a otra liga y ganar quizá más dinero, pero estoy contento de que haya escogido a este club y a la Bundesliga”, considera Rudi Völler, director deportivo del Leverkusen.
Las alabanzas de la parte directiva no provocan la soberbia del ‘Chicharito’ dentro del vestidor. Si bien es el hombre a seguir de su conjunto, se muestra afable con el resto del plantel. Sus compañeros lo describen como un tipo leal, muy agradable, amigo y consejero.
“Lo mejor de Javier es que es un muy buen compañero. No se siente una superestrella, ni se comporta como tal. Es muy cercano a nosotros y siempre nos trata de animar para conseguir las victorias”, señala, con ayuda de un traductor el mediocampista campeón del mundo con Alemania, Cristoph Kramer en entrevista con EL UNIVERSAL.
“Puedo decir que es mi amigo, es un chico realmente muy chistoso y nos llevamos bien. Siempre está con el apoyo a todos, incluidos los más chicos”, expone Hakan Calhanoglu, mediocampista creativo turco.
El carisma de Hernández provoca que sea un factor indispensable para la mercadotecnia. “El 90 por ciento de las playeras que se venden con nombre son de ‘Chicharito’. Se han vendido miles de sus playeras. Hasta estamos buscando socios para venderlas en México”, expone Frank Güttemann, director operativo de mercadotecnia del Bayer.
Javier Hernández necesitó apenas unos meses para apoderarse del amor de Leverkusen.