Lejos de encontrarse con un ambiente adverso y hostil, el Tri llegó a su hotel de concentración en San Pedro Sula, en Honduras, sin problema.
Alrededor de 10 aficionados mexicanos acudieron al arribo de la escuadra nacional. Gritaron vítores a los futbolistas que mañana enfrentarán a Honduras en la segunda fecha de la eliminatoria mundialista rumbo a Rusia 2018.
El operativo tuvo dos patrullas que resguardaron la integridad física de los pupilos de Juan Carlos Osorio.
Algunos fans locales se acercaron para pedir autógrafo sin tener suerte.
Veinte agentes de seguridad se encuentran dentro del recinto donde se aloja el Tri para protegerlo de cualquier incidente.